Francia
Es la Duna de Pilat y está a la entrada de la bahía de Arcachon, en Francia.
¿A santo de qué una duna tan inmensa en el litoral aquitano del Golfo de Vizcaya? su origen hay que buscarlo hace miles de años y las cifras que la describen son imponentes: 60 millones de metros cúbicos de arena fina distribuidas en 87 hectáreas de superficie y ocupando casi 3 kilómetros de líena de cosca y hasta 500 metros de bosque, un bosque que está integrado en el parque natural de Landas de Gascuña y que cada año pierde entre 3 y 4 años que sucumben ante esta imponente duna.
Visitar la Duna de Pilat es toda una aventura, es más, escalarla podríamos considerarlo incluso deporte de riesgo si se hace en un día de clima dudoso porque aquí las tormentas de arena resultan casi tan brutales como las que se pueden sufrir en el desierto; otra cosa es si te animas a escalar la Duna de Pilat en verano porque si bien la subida es dura el premio que recibirás al otro lado, que incluye un refrescante baño en el mar, es impagable.
Decimos que la subida es dura porque se trata de la duna más grande de todo el continente europeo y solo sucumbe ante el espectacular tamaño de la duna del Bolsón de Fiambalá en la provincia argentina de Catamarca y también la del cerro La Marcha en la provincia de Nazca, en Perú; por aquello de barrer para casa cabe aquí recordar también la duna rampante de Camariñas porque, sin ser tan grande como la Duna de Pilat, le gana en altura, la de Camariñas alcanza los 150 metros de altura mientras la de Pilat se queda en los 110.
Nos preguntábamos al principio por el origen de la Duna de Pilat y nos remitíamos a miles de años atrás pero en un tiempo más cercano, allá por el S.XVIII, se produjo un copalso de un banco de arena situado frente a la costa donde vemos hoy esta duna dotando así a la antiquísima duna de materia prima para hacerse más y más grande.