Europa
No es un secreto que en Francia saben convertir cualquier momento gastronómico en una exaltación de sabores. Es el caso del desayuno. Imposible resistirse a delicias como su bollería, rica en croissants, bizcochos de leche, macarons... pero tampoco a su deliciosa mermelada de frutas, su miel de flores o sus tés importados de Asia. Así las cosas, si unes la genialidad francesa para el desayuno con su capacidad de inventiva para el resto de platos, los brunch se han convertido en toda una experiencia. No son pocos los parisinos que esperan con ganas que llegue el domingo por la mañana para, como dictan los cánones, acercarse hasta el centro de la capital y proseguir su particular ruta de estas comidas de varias horas de duración. En la ciudad hay una oferta gigante, con lugares para todos los gustos que han dado pie incluso a guías específicas sobre el tema. Nosotros hemos seleccionado seis lugares para un brunch con mucho encanto. En ellos, el viajero, pero también el parisino, lo tendrán difícil para no ponerles un 10 en su nota particular. Marcos de lujo para un remate de fin de semana sin igual.