Viaja sin salir de casa
Seguro que más que uno ha reconocido varios lugares cuando visita una ciudad por primera vez, pasar por una calle, un monumento o un edificio como el hotel de Muerte en Venecia (1971) dirigida por Luchino Visconti, y pensar “yo he estado antes aquí”. Dicho hotel se encuentra en el Lido, la playa de Venecia. Probablemente París, Roma o Londres sean las ciudades europeas más inmortalizadas en las grandes pantallas. Sin duda una de las imágenes más míticas del cine y de la ciudad de Roma la encontramos en La Dolce Vita, de Federico Fellini. Este clásico de 1960 ayudó a dar más popularidad a la emblemática Fontana di Trevi, en esa escena en la que Anita Ekberg se da un baño en la fuente.
El diablo viste de Prada, rodada en 2006. Aunque la mayor parte del film tiene lugar en Nueva York, nos ha dejado preciosas imágenes de París, como por ejemplo la incluida en esta galería, donde Andy (Anne Hathaway) tira su móvil a una fuente, y vemos la noria de fondo. En la misma ciudad y gracias a Paris, Je t’aime (2006), hoy conocemos uno de los fotogramas más famosos del cine, el plano con la Torre Eiffel y la boina roja.
La romántica Antes del amanecer (2003) nos lleva de paseo por las calles de Viena, y por esos puentes que cruzan el Danubio. No a muchos kilómetros de distancia, está Berlín, donde transcurre la acción de Good Bye, Lenin! (2003). Entre los lugares captados en el rodaje está la mítica torre de Alexanderplatz.
Match Point, como muchas otras películas, nos hace un tour por las calles londinenses, de hecho, nos enseña una de las obras de Banski, como vemos en la imagen de la galería.
Stockholm, cinta dirigida por Rodrigo Sorogoyen y ambientada en Madrid, incluye preciosos fotogramas del skyline de la capital. Es bien sabido que Santorini es una de los territorios insulares del sur de Europa más deseados, y precisamente, Mamma Mia!, la versión en cine del famoso musical, puede que sea una de las razones por las que esta isla griega esté en nuestra lista de deseos.
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