Salamanca
En las Arribes del Duero podemos encontrar un gran número de cascadas. Estas son las cuatro que, de una manera u otra, no te dejarán indiferente. ¡Son un auténtico regalo de la naturaleza!
Las Arribes del Duero es uno de los enclaves más visitados del país y, siendo honestos, no es para menos. Presenta una enorme belleza, en todos los aspectos posibles. Es una manera más que perfecta de disfrutar de un paisaje de ensueño, con ese río que marca la frontera entre España y Portugal.
No solo tenemos la oportunidad de disfrutar de unos espectaculares miradores sino que, a su vez, somos conscientes de que las provincias de Salamanca y Zamora comparten espectaculares cascadas. Este año, uno de los más caudalosos que se recuerdan, nos está dejando imágenes que, desde luego, jamás olvidaremos. Es el momento de hacer repaso por algunas de las cascadas más espectaculares que podemos encontrar en las Arribes del Duero.
Pozo de los Humos
Es la cascada por excelencia de la provincia de Salamanca, siendo además de las más espectaculares de toda España. ¡Sobran las presentaciones, desde luego! En los últimos años, gracias a las continuas lluvias, hemos podido observar la mejor versión de esta cascada. Desde el mirador de Pereña de la Ribera tenemos unas vistas ideales. A su vez, podemos estar prácticamente metidos en la cascada, desde las conocidas pasarelas de Masueco. Estamos ante 50 metros de caída de agua cuya neblina da nombre a este lugar emblemático.
Pozo Airón
Estamos ante una cascada de lo más peculiar, sobre todo por la manera en la que podemos disfrutar de la caída del agua. Podemos acceder a este lugar desde Pereña de Ribera, por una pista de poco más de 5 kilómetros ida y vuelta. Si prefieres ir en coche, hay una explanada al final de este sendero. Esta cascada tiene una caída en el arroyo de los Cuernos de unos 20 metros y desemboca en el río Duero.
Si vamos con cuidado podemos bajar hasta la base e introducirnos, de lleno, en una pequeña cueva situada justo detrás de la cascada. De esta manera, veremos esa cortina de agua frente a nosotros. ¡Algo absolutamente mágico! Estamos ante una característica que la hace única.
Cachón de Camaces
Este lugar está algo oculto, entre espectacular bloques de granito. Es, sin lugar a dudas, todo un espectáculo de la naturaleza. Este cachón lo podemos encontrar junto a la carretera SA-330 que comunica, a través del puerto de La Molinera, Saucelle con Hinojosa de Duero y Lumbrales. Allí encontraremos un mirador que nos permitirá disfrutar de este lugar, eso sí, de forma lateral y no frontal. El río Camaces también cuenta con sus propias “arribes” justo antes de desembocar en el río Huebra y éste, a su vez, en el río Duero.
El Desgalgadero
Es una de las más desconocidas de las Arribes del Duero, sin lugar a dudas. Es una cascada que cuenta, aproximadamente, con unos 60 metros de altura en el arroyo de la Ribera de Villarino. Éste, posteriormente, desemboca en el río Tormes. Por tanto, también tiene sus propias “arribes”.
Si queremos disfrutar de este lugar, debemos tomar una vía asfaltada que sale a la misma entrada de Villarino, justo en dirección al Teso de San Cristóbal. Nada más pasar el puente, a la derecha, hay un camino de tierra. A tan solo 300 metros, cuando llegas a un olivar, tendrás que dejar el coche. Una vez allí, deberás andar una hora en la dirección en la que se encuentra un enorme árbol. Al final de este camino, se divisa ese Desgalgadero que no te dejará indiferente.