DESCUBRE CASTILLA LA MANCHA
¿Quieres ver molinos? No hace falta que te vayas a Holanda. En Castilla la Mancha tienes muchos entre los que elegir.
Puede que para tu próximo viaje quieras viajar a un destino en el que haya molinos. Y es que estas edificaciones de grandes hélices pueden regalarnos estampas que enamoran a cualquier viajero. Pues debes saber que no hace falta que te vayas a Holanda para verlos: en Castilla la Mancha hay muchos pueblos repletos de molinos de viento.
Así, puedes dirigirte por ejemplo a Consuegra, un municipio toledano con 12 molinos que le otorgan un carácter propio. Todos ellos datan del siglo XIX y se encuentran sobre el cerro de Calderico, permitiendo a quienes lo visiten disfrutar de sus estructuras bastante bien conservadas. Además, los molinos Bolero, Sancho, Rucio, Espartero y Mochilas están todavía en funcionamiento.
Por otro lado, Campo de Criptana es otro municipio manchego en el que ver molinos de viento. En este caso, hay que acercarse a la Sierra de la Paz de este pueblo de Ciudad Real para admirar el bonito escenario que conforman sus 10 molinos.
Viajamos hasta Cuenca y en concreto hasta Mota del Cuervo, también conocido como El Balcón de la Mancha, para ver los siete molinos que han sobrevivido de los 23 que había antiguamente. En El Gigante se puede ver cada sábado una muestra de cómo funcionan estas edificaciones.
En Herencia hay otros siete molinos más, pero destaca el más antiguo de todos, construido en 1790. Sus nombres son El Ama, La Sobrina, Dulcinea, Maritornes, La Dueña Dolorida, La Duquesa y Teresa Panza.
Finalmente vamos a citar otros tantos pueblos más en los que ver molinos de viento para que tengas más donde elegir. Alcázar de San Juan, en Ciudad Real, tiene cuatro; en El Romeral, Toledo, se conservan muy bien cuatro más. Y en Belmonte, Cuenca, hay tres: en uno de ellos se puede presenciar su funcionamiento.