NOVEDAD EN LA CIUDAD CONDAL
Ya es posible pasear por los Jardines de la Rambla de Sants, un bulevar de 800 metros de recorrido que cubre las vías del tren y que se han convertido en la primera de las ramblas en altura, o aérea, de la ciudad. Toda una novedad que refuerza los puntos verdes de Barcelona.
Han sido necesarios 10 años de proyecto pero ya es una realidad. Barcelona ha estrenado este verano los Jardines de la Rambla de Sants, su primera rambla en altura y que, con 800 metros de largo, cubre las vías del ferrocarril, así como une los barrios de Sants y La Bordeta. La elevación de la rambla alcanza los 12 metros en algunos puntos y es un gran espacio verde que se suma a la oferta de la ciudad.
Es la primera rambla aérea y sus vistas ya han sido inmortalizadas tanto por barceloneses como por los muchos turistas que han abarrotado la capital catalana en las últimas semanas (hasta el punto de que ha habido quejas por el número de ellos entre los propios visitantes). Además de miradores, hay espacios para hacerse con algún snack, zonas de juegos, biblioparque y, sobre todo, mucho jardín.
De hecho, la rambla es todo un ejemplo de la diversidad del ecosistema autóctono, ya que los parterres de la misma muestras siete especies de árboles, pero todos ellos locales, destacando las sóforas y las tipuanas. Además, un jardín didáctico adicional ayuda a entender la historia de estas especies, todas propias de la Barcelona del siglo XVIII y desaparecidas de la Gran Ciudad con su crecimiento y urbanización moderna.
Son los vecinos los más beneficiados por una infraestructura que aprovecha el espacio que ofrece el techo de la cubierta de las vías férreas. Como explican desde el propio Ayuntamiento, "se cierra una fractura provocada por las vías del tren y que separaba ambos barrios". Claro que la medida que querían los vecinos era el soterramiento. Afortunadamente, turistas y locales ya han mostrado su satisfacción por cómo ha quedado este nuevo mirador amplio, de 760 metros lineales.
La nueva rambla se ha creado conuna iluminación a base de leds, energía fotovoltáica y mantenimientos responsables con el medio ambiente. Además, se puede hacer un paseo por la vegetación de mar y, otro, por el de montaña, que se diferencian por una combinación cromática.
Sin duda, todo un paseo que habrá que estrenar cuanto antes, a un paso de todo en Barcelona.
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Ayuntamiento de Barcelona