MADRID
Viajamos hasta la capital española para conocer la sorprendente historia que esconde la Iglesia de San Antonio de los Alemanes, conocida como la Capilla Sixtina de Madrid.
Es el momento más que perfecto para poner rumbo a Madrid. Allí encontramos un gran número de monumentos, construcciones y rincones que no dejan absolutamente indiferente a nadie. Un claro ejemplo lo encontramos en la sorprendente Iglesia de San Antonio de los Alemanes, situada en la madrileña calle de la Puebla.
Entre otras cuestiones, destaca por ser extremadamente preciosa. Tanto es así que es conocida como la Capilla Sixtina de Madrid. ¡Nada más y nada menos! Por ese mismo motivo, estamos ante una de las visitas obligadas si estás pensando en poner rumbo a la capital de España.
Para comenzar, debemos saber que entre los años 1624 y 1633, coincidiendo con el reinado de Felipe III, se erigió la Iglesia de San Antonio de los Alemanes. En su origen esta construcción era utilizada, al igual que el hospital adyacente, para cuidar a aquellos peregrinos y enfermos que procedían de Portugal y que transitaban por la ciudad. De ahí que, inicialmente, la iglesia fuera bautizada como nada más y nada menos que San Antonio de los Portugueses.
En el año 1640, la Corona española perdió Portugal. Como consecuencia, este templo quedó completamente desocupado por un tiempo. Más tarde, concretamente en 1689, la reina Mariana de Austria, mujer de Felipe IV, otorgó esta iglesia a aquellos alemanes católicos que acompañaban en Madrid a Mariana de Neoburgo, segunda mujer de su hijo Carlos II. Fue entonces cuando el templo empezó a utilizar el nombre de San Antonio de los Alemanes, algo que se mantiene en la actualidad.
Esta Iglesia, dedicada a San Antonio de Padua, llama poderosamente la atención por numerosos elementos. Pero si hay algo por lo que destaca es porque una gran cantidad de destacados pintores de la época contribuyeron en su decoración. Un claro ejemplo lo encontramos en Francisco Ricci, que fue quien se encargó de esa imponente composición arquitectónica que podemos ver en la cúpula.
No podemos dejar de mencionar a Lucas Jordán, que repintó las columnas de los frescos, mientras que Francisco Carreño de Miranda pintó a San Antonio ascendiendo hacia la Virgen. Estamos ante tantas y magníficas obras, situadas sobre en el techo, que inevitablemente nos recuerda, en cierta manera, a esa mítica, histórica y preciosa Capilla Sixtina de Miguel Ángel que podemos encontrar en el Vaticano.
Hay que tener en cuenta que existen dos opciones para poder visitar la Capilla Sixtina de Madrid. Por un lado está la visita libre, que incluye tanto la iglesia como la cripta, y que tiene un precio de 5 euros a modo de donativo. Este servicio cuenta con una audioguía gratuita tanto en español, inglés o francés. Está disponible de lunes a sábado de 10:00 a 17:00 hrs y tiene una duración de unos 30 minutos, aproximadamente.
Por otro lado, tienes la opción de descubrirla a través de una visita guiada. De esta forma, no solamente podrás visitar la iglesia y la cripta, sino también la sacristía y hasta el museo de la Hermandad del Refugio y Piedad. El coste es de 10 euros y tiene una duración aproximada de una hora. Se pueden realizar de lunes a sábado en tres horarios, que son a las 10:30 hrs, a las 11:00 hrs y a las 12:30 hrs.