Castillo de Zahara de la Sierra: ¿sabías que el rey Alfonso X el Sabio estuvo en él?

Viajamos hasta la localidad andaluza de Zahara de la Sierra, donde encontramos un magnífico castillo. Éste pertenece a la época nazarí, y está situado en un lugar absolutamente estratégico: entre el embalse de Zahara y el Parque Natural de la Sierra de Grazalema.

Tal es su importancia arquitectónica e histórica, que en el año 1985 fue declarado Bien de Interés Cultural. Para conocer su origen, debemos viajar hasta la época del Reino Nazarí de Granada. Un año a destacar fue 1282, cuando el Rey Alfonso X el Sabio solicitó verse con el sultán Abu Yúsuf Yaqub ibn Abd al-Haqq.

El objetivo del monarca castellano era claro: pedirle ayuda para luchar contra su propio hijo, Sancho IV, que había tomado la decisión de sublevarse. La reunión se celebró en el Castillo de Zahara de la Sierra, al estar en la frontera entre Castilla y el Reino Nazarí.

Años más tarde, concretamente en 1407, esta zona fue conquistada por el Rey Juan II, y permaneció en manos cristianas hasta 1481, cuando volvió a ser de los nazaríes. A pesar de todo, es importante tener en cuenta que la conquista definitiva por parte de los cristianos llegó tan solo un par de años después.

Estamos hablando, cómo no, del momento en el que Rodrigo Ponce de León, como marqués de Cádiz, toma el control de este lugar en nombre de los Reyes Católicos. Es importante recordar que en 1410 se llevó a cabo un saqueo de la villa por parte del Emir de Granada, lo que provocó que el infante Fernando tomara Antequera.

Este Castillo de Zahara de la Sierra, durante la Guerra de independencia española, tuvo un uso militar. Y fue la última vez que se utilizó con ese fin. Y es que estuvo ocupado por las tropas francesas, lideradas por el general Soult. En cuanto a la ofensiva española, debemos tener en cuenta que seguía las órdenes de Pedro de Pineda.

Bien es cierto que de esta fortaleza tan solo se conservan algunas partes de la muralla, tanto de la época nazarí como de la cristiana. En la actualidad se puede acceder a la torre y, desde su punto más alto, encontramos unas vistas sencillamente mágicas de Zahara de la Sierra, pero también de su embalse y de pueblos cercanos. ¡Merece la pena visitar esta fortaleza, no tenemos ninguna duda!