La Catedral de la Almudena, patrona de Madrid

Cuando pensamos en la Catedral de la Almudena no solemos ir más allá de los años 90 porque este templo fue consagrado en 1993 por el papa San Juan Pablo II pero lo cierto es que la primera piedra de esta catedral se puso sn el año 1883, en tiempos del rey Alfonso XII: está ubicada frente al Palacio Real, muy cerca del emplazamiento de la antigua Iglesia de Santa Maria de la Almudena que se levantó en su día sobre una antigua mezquita, no así la catedral que, según se ha ido descubriendo durante las obras y en las excavaciones posteriores, ocupa el espacio de la antigua judería de Madrid; el propio nombre de la Almudena es de origen árabe y significa ciudadela.

Esta imponente catedral luce su fachada principal, de estilo neoclásico, frente a la plaza de la Armería del Palacio Real y está coronada por una cúpula doble que es barroca por fuera y gótica por dentro, además está coronada por las estatuas de los 12 apóstoles y guarda con devoción la hornacina barroca que protege la imagen de la Virgen de la Almudena. La planta de la catedral es de cruz latina (con una nave central y dos laterales), un crucero de tres naves y una cabecera con cinco capillas; en cuanto al estilo, contrasta el exterior con el interior: el exterior es entre neoclásico y barroco mientras el interior luce líneas góticas empezando por la importancia de las vidrieras policromadas.

La catedral cuenta también con una cripta, que fue de hecho lo primero que se construyó, en la que descansan algunos personajes ilustres o íntimamente ligados a su construcción, entre ellos Enrique María Rapullés, arquitecto de la propia cripta, y su majestad Mercedes de Orleans, quien fue reina de España en el S.XIX; como sucede con los grandes templos como este, mantiene su propio museo y en su caso, además, la entrada que da a acceso al museo permite subir a la cúpula, sin duda una visita imperdible si te animas a entrar en la catedral.

¿Más detalles llamativos de la Catedral de la Almudena? El órgano, que está integrado en un mueblo cuyo diseño se inspira en los clásicos retablos neogóticos, data de 1999 y es, junto a la cúpula (tanto por dentro como por fuera) y las vidrieras del ábside (obra de Kiko Argüello) uno de los aspectos mas atractivos de este templo desde el punto de vista arquitectónico. Un detalle más que nos recuerda que la de la Almudena es la Catedral de Madrid: la capilla central de la girola está dedica a San Isidro Labrador y su esposa Santa Maria de la Cabeza.

¿Y por qué te hablamos hoy de la Catedral de la Almudena? Te lo decíamos en la apertura de esta noticia: Madrid celebra el próximo 9 de noviembre a su patrona, la Virgen de la Almudena ¿qué mejor lugar que la propia catedral para empezar a hacerlo? Y después, por supuesto, tocará degustar una rica corona de la Almudena (todo un anticipo del roscón de reyes en Madrid).