Andalucía
Una de las grandes joyas que podemos encontrar en Alcalá la Real, en la provincia de Jaén, es la Fortaleza de la Mota. Descúbrela a través de estos curiosos datos.
Jaén es una de las provincias más espectaculares de España, que va mucho más allá de sus preciosos olivares. Tanto es así que es considerada como la provincia con más castillos de Europa, ¡y la segunda de todo el mundo! Eso quiere decir que, en prácticamente cada municipio, encontramos una edificación de estas características.
Uno de los más conocidos es, sin lugar a dudas, el Castillo de la Fortaleza de la Mota, ubicado en Alcalá la Real. Esta fortaleza también es conocida como Castillo de Alcalá la Real, puesto que está ubicado en esta localidad, concretamente en el conocido como Cerro de la Mota. Un recinto que es espectacular, qué duda cabe.
Estamos ante un recinto principalmente defensivo, aunque bien es cierto que a lo largo de la historia ha estado en manos tanto de cristianos como de musulmanes. Este municipio era frontera directa entre el Reino de Castilla y el Reino Nazarí de Granada. Es entonces cuando, en el año 1340, Alfonso XI consigue conquistar la Fortaleza de la Mota.
Por ese mismo motivo, el Reino de Castilla no dudó un solo segundo en realizar generosas donaciones para restaurar este castillo. ¡Pero hay más! Ya que también se construyó la conocida como Torre Nueva, uno de los grandes símbolos de esta preciosa fortaleza de Alcalá la Real.
Pero no todo queda ahí, ya que encontramos otros lugares verdaderamente importantes dentro de este castillo. Entre otras tantas cuestiones, cabe mencionar La Iglesia Mayor Abacial, su Alcázar y, por supuesto, la cárcel. A día de hoy está bastante deteriorada, pero es uno de los puntos más visitados al tener unas vistas de ensueño tanto de Alcalá la Real como de Sierra Nevada.
La Ciudad Oculta de la Mota, uno de los mayores secretos
La dura conquista hizo que surgiera esta ciudad oculta. Era una clara estrategia por parte de los cristianos, con el fin de vencer a todos sus adversarios. ¿De qué manera? Envenenando las aguas de esos pozos que se encontraban cerca de la muralla. Así pues, los musulmanes se vieron en la obligación de hacer el conocido Pozo de la Conquista.
Los cristianos construyeron, por su parte, una contramina que terminó conectada a la de los musulmanes. Por lo tanto, estamos ante un espectacular laberinto de pasillos ubicado en el mismo interior de la montaña. Es lo que hoy en día conocemos como Ciudad Oculta de la Mota, por la que se puede acceder de manera directa al castillo.
En la Fortaleza de la Mota ¿había una nevera?
Parece una locura, ¡pero así es! Contaba con lo que se conoce como nevero, es decir, un lugar de almacenaje de hielo, que era guardado cuando nevaba o, incluso, transportado de la montaña más cercana. Su fin principal era por cuestiones medicinales. Un dato que, desde luego, pocos conocen pero que deja a más de uno sin palabras. ¡Y no es para menos!
Lo que es evidente es que uno de los puntos fuertes, turísticamente hablando, de Alcalá la Real lo encontramos en este Castillo de la Mota. El hecho de que este municipio fuera, en su día, frontera entre dos importantes reinos hace que, actualmente, podamos sentir que formamos parte de esa historia. Una visita absolutamente imprescindible, qué duda cabe.