PALENCIA
Ponemos rumbo a Castilla y León para conocer qué esconde uno de los edificios más significativos situado en Astudillo, en la provincia de Palencia.
Es el momento más que perfecto para poner rumbo a la provincia de Palencia, concretamente hasta Astudillo. Allí encontramos un gran número de construcciones, así como monumentos, que logran dejar completamente sin palabras a todos aquellos turistas que visitan este lugar ubicado en Castilla y León.
Un claro ejemplo es el conocido como Palacio de Pedro I de Castilla. Estamos ante una construcción que forma parte de un conjunto, en el que también se encuentran un convento, la iglesia del mismo y el Palacio de Doña María de Padilla. Todos estos edificios, como no podía ser de otra manera, fueron declarados Monumento Nacional en el año 1931.
Entre las numerosas características que podemos encontrar en este conjunto, debemos saber que el convento es fundación real, de nada más y nada menos que Doña María de Padilla. El permiso para poder cumplir ese objetivo fue otorgado por el Papa Inocencio VI en el año 1354.
No podemos dejar de mencionar que el Palacio de Pedro I de Castilla, por lo tanto, cuenta con estancias reales para las visitas que llevase a cabo el monarca, y están separadas del Palacio de su mujer por un patio con estanque. Esta construcción fue erigida por alarifes mudéjares, por lo que su apariencia es bastante similar al del Palacio Real de Tordesillas o, incluso, los Reales Alcázares de Sevilla.
A la hora de realizar esta reconstrucción, los encargados de la misma tenían varias cuestiones muy claras. Entre ellas, tratar por todos los medios de preservar todo lo encontrado y, a su vez, hacer reversibles las diversas actuaciones que se han llevado a cabo en la etapa contemporánea.
Por lo tanto, se dio el paso de sanear el exterior para tratar de eliminar de una vez por todas esa humedad que tenía y, por ende, adecuar el interior de las salas situadas en la parte superior del Palacio. El hecho de sobreponer un forjado ligero al artesonado ha hecho posible que el techo se librase de sobrecargas excesivas, haciendo posible que la primera planta empezase a ser utilizada como museo.
De esta forma, los arqueólogos habrían llegado a una conclusión: el palacio situado en Astudillo podría tener nada más y nada menos que una pequeña sala termal, que funcionaría a través de vapor o un sistema hidráulico en el que se filtraría el agua captada de diversos pozos. A pesar de todo, debido a que esta sala termal está parcialmente destruida, por el momento no se han podido confirmar estos datos. Eso sí, se puede visitar en la actualidad. Por lo tanto, si estás pensando en poner rumbo a la provincia de Palencia, no dejes pasar la oportunidad de visitar Astudillo para dejarte llevar por el encanto que desprende el Palacio de Pedro I de Castilla.