Otoño con tu perro
Pasar tiempo con nuestro perro es uno de los bienes más preciados, pero es aún más especial si podemos incluirles en nuestros planes, y no tener que limitarnos al parque de siempre o a la misma ruta por el campo.
Ciudad encantada de Cuenca
Este paraje natural de formaciones calcáreas o calizas constituye un monumento natural y por lo tanto conforma un entorno protegido y que fue declarado Sitio de Interés Nacional. Podremos pasear con nuestro peludo amigo por los diferentes espacios de este lugar tan especial. El recorrido es de hora y media, será un paseo muy agradable para todos. Disfrutaremos de la compañía de nuestra mascota, y de una visita muy especial. Descubriremos un lugar único y podremos hacer noche en uno de los alojamientos “dog-friendly” de la ciudad de Cuenca.
Pasar el día en la Sierra de Gredos
Es verdad que tal vez de primeras la idea de la sierra no sea la más innovadora, pero siempre podemos buscar rutas nuevas. Y eso es fácil en el Parque regional de la Sierra de Gredos, pues alberga una de las sierras más extensas del Sistema Central y ocupa parte de cinco provincias distintas: Madrid, Toledo, Cáceres, Ávila y Salamanca. Podemos subir hasta el Circo de Gredos y la Laguna Grande; o bien hacer la ruta de subida al Alto del Mirlo; y los más valientes pueden intentar conquistar el pico Almanzor.
Visitar los Pueblos Negros
Los Pueblos Negros se encuentran en la zona limítrofe entre Madrid y Guadalajara, y sus casas se caracterizan por usa la pizarra como elemento principal en su construcción. Podremos pasear por los diferentes pueblos como La Hiruela, Majaelrayo, Campillo de Ranas, o Valverde de los Arroyos entre otros. Admiraremos esta arquitectura negra tan característica de la zona, a la vez que paseamos con nuestro perro, ellos también agradecen pasear por sitios nuevos, y cambiar de aires. Además, es fácil encontrare establecimientos que admitan animales y poder comer sin ningún problema.
El Monasterio Santa María de Rioseco, Burgos
Puede que estemos ante uno de los pocos lugares que nos permitan hacer la vista con nuestro amigo canino. Se encuentra a orillas del río Ebro en el Valle de Manzanedo. Es un antiguo monasterio que perteneció a la orden del Císter y hasta el año 2018 estuvo incluido en la Lista roja de patrimonio en peligro, debido a su estado de abandono. En 2019 fue declarado Bien de Interés Cultural. Podemos visitarlo casi cualquier día ya cualquier hora, veremos el claustro, el altar de la iglesia, la cúpula… Será una experiencia muy bonita.
La playa
Ir a la playa con nuestra mascota es acierto seguro. En ella pueden correr hasta caer rendidos, se desfogarán, excavarán hoyos y jugarán con las olas. Podemos aprovechar y hacer algo de deporte con ellos, o simplemente dar un paseo tranquilo. Podemos hacer un pequeño picnic para comer y llevarle mucha agua a nuestro perro. También podemos buscar algún restaurante con terraza que sea “dog-friendly”. Eso sí, antes de ir a la playa, debemos consultar si es posible llevar a nuestro perro, y buscar aquellas en las que podamos llevarlo sin problemas.