La costa se masifica. Cada año son más los turistas extranjeros y nacionales que se desplazan a la costa para pasar los días de verano. En la mayor parte del levante las temperaturas son igualmente altas, no hay sitio en la playa para poner la toalla y cobran las cañas a precio de oro. En cambio, si nos decantamos por ir a ciudades como puede ser León o o pueblos de interior de Asturias o Galicia, dispondremos del entorno solo para nosotros. A lo mejor Castilla-La Mancha o las provincias de interior de Andalucía no sean una buena idea pero en agosto ya empieza a refrescar por las noches en buena parte de Castilla y León, Navarra o La Rioja. Salir por la noche y ver esos pequeños pueblos o ciudades con reminiscencias medievales iluminadas es una auténtica gozada. Dar un paseo tranquilo con las calles sin ajetreo y con viento nocturno y refrescante. Es bien sabido que en la península Ibérica se come de fábula, pero especialmente bien y a buen precio en la mitad norte. Carnes y verduras frescas y de calidad a muy buen precio. Podremos combinar visitas turísticas con buena gastronomía, como por ejemplo en la ciudad de León o Burgos. Los Picos de Europa y el Prepirineo tanto catalán como aragonés son un ejemplo perfecto de combinar excursiones por la naturaleza con buenos platos típicos para reponer energías. Tal vez tengamos que cambiar la caña fresquita por una copita de vino, o un buen vaso de sidra que acompañe la comida. Pero como no hará excesivo calor, no nos importará hacer tal cambio. Y por qué no aprovechar la coyuntura para hacer algo de Enoturismo en La Rioja, por ejemplo. Otra ventaja de evitar ir a los destinos más populares es que cuando hagamos dichas excursiones o visitas culturales no habrá problema de espera de interminables colas como puede haber en La Sagrada Familia de Barcelona. Y si algún día el calor es muy asfixiante siempre podemos optar por lanzarnos a probar deportes como el rafting, piragüismo descenso de barrancos y así refrescarnos un poquito. Son perfectos para practicar con los amigos o la familia y tener recuerdos muy especiales ¡Incluiremos nuevas experiencias en nuestro curriculum vacacional! Además, en las áreas de montaña la cobertura falla y nos obligará a desconectar al cien por cien con el mundo exterior, y a conectar con nosotros mismos y nuestros amigos o familia en plenitud.