España
La Ruta del Cister, ubicada en las provincias de Tarragona y Lérida, identifica a un territorio formado por las comarcas del Alt Camp, la Conca de Barberà y el Urgell. ¿Y por qué ruta del Cister? Pues el nombre se debe al patrimonio artístico y cultural que tiene cada una de estas comarcas. Nada más y nada menos que tres maravillosos monasterios cistercienses el de Santes Creus, el de Poblet y el de Vallbona de les Monges. Los tres monasterios son tres de los máximos exponentes de la Orden del Cister en España, y son los que marcan esta ruta que va más allá de los monasterios, de su monumentalidad y de su sobriedad. Una ruta en la que vamos a descubrir unas comarcas preciosas, con mucha tradición, mucho encanto y paisajes maravillosos. Unas comarcas productoras de vinos, cavas y artesanía. Con fiestas y tradiciones muy arraigadas y espacios naturales que hay que descubrir. El Alt Camp es un terrirorio con gran diversidad de montañas llanuras, valles, ríos, ermitas, masías, aldeas perdidas, pueblos y villas. Famosa sobre todo por su cocina típica y tradicional y por sus calçotadas. También Valls, capital de la comarca, es conocida por ser la cuna de los Castillos, y se debe al enfrentamiento entre dos grupos de castellers, que se celebra en la plaza del Blat en esta localidad a lo largo de la temporada. Y es en esta comarca donde se ubica el primero de estos espectaculares y soberbios monasterios cistercienses, el Monasterio de Santes Creus. En la Conca de Barberà se ubica otro de los famosos monasterios cistercienses, el Monasterio de Poblet. Por su orografía, esta comarca, es una zona privilegiada para el cultivo de las viñas y la elaboración de vinos y cavas. Encontraremos preciosos paisajes en sus valles del centro y del sur de clima mediterráneo, y por contra, en el norte y en el interior, una orografía bien distinta, con barrancos, bosques y montañas, con un clima más extremo y continental. Por último el Urgell, una comarca de Lérida en el interior, alejada de los núcleos turísticos. Es ideal para los que buscan paz, tranquilidad y rincones para pasear. Pequeños y encantadores pueblos junto con paisajes auténticos. El patrimonio cultural de el Urgell es muy amplio, pero sobretodo, viene marcado por joyas arquitectónicas tan importantes como el monasterio cisterciense de Vallbona de les Monges o la iglesia románica de Santa Maria de Agramunt. Todos los municipios de estas tres comarcas forman la Ruta del Cister, con sus monasterios cistercienses de Vallbona de les Monges, Santes Creus y Poblet. En las tres hay rutas señalizadas para practicar el senderismo o ir en bicicleta para disfrutar de la naturaleza en cualquier época del año. La Ruta del Cister ahora tiene el aliciente gastronómico de los típicos calçots de Valls, que son toda una experiencia si todavía no los conoces. Si es tu primera vez debes saber que, se hacen sobre llamas de madera de sarmiento, se sirven directamente de las parrillas sobre tejas de adobe envueltos en papel. Te dejan un babero gigante porque al tener que pelarlos, las manos quedan negras. Una vez pelados se mojan en salsa romesco y se comen con la mano. Los segundos siempre suelen ser las maravillosas carnes o butifarras a la brasa catalanas. Una ruta para los amantes del turismo rural, cultural y gastronómico. Una escapada fabulosa para este mes de febrero que ahora comienza. Atentos a los detalles y los consejos. Os dejamos alojamientos rurales auténticos para vivir la campiña catalana y hoteles para disfrutar. Imágenes. Diputació de Tarragona