Las puertas de Europa
En muchas ciudades encontramos arcos o puertas en forma de arco y todos son dignos de admirar. Te mostramos los mejores.
En todos los países de Europa podemos encontrarnos con arcos del triunfo que construyeron los romanos después de alguna victoria. Pero también nos encontramos con arcos que en realidad son puertas de acceso a la ciudad. Sea como sea, todos son complejos y elaborados. Bonitos. Imponentes en algunos casos. Y merecen si más no unos minutos en los que ser admirados.
Arco del triunfo de París
Este es sin duda el más famoso de todos y por tanto el que más gente conoce. Es uno de los símbolos de la capital de Francia y está en los Campos Elíseos, siendo un monumento bastante imponente. Tiene 50 metros de altura, 45 metros de ancho y 22 metros de profundidad y fue construido tras una orden de Napoleón después de una victoria. Es por eso que en sus paredes se pueden ver grabadas algunas escenas que representan diferentes victorias.
Arco del triunfo de Barcelona
Está situado en un paseo justo al lado del Parque de la Ciutadella y fue construido como puerta de acceso a la Exposición Universal de Barcelona en el año 1888. Pero a su vez fue una puerta al modernismo. Es de color rojizo y de estatura clásica y en sus paredes tiene muchos elementos decorativos y grabados que representan la agricultura, el comercio, la industria y el arte. Además, arriba del todo tiene los escudos de todas las provincias de España.
Puerta de Brandenburgo en Berlín
Sin duda, esta puerta es uno de los símbolos de la capital de Alemania. Como en el caso de Barcelona, no se trata de un arco como tal, sino que es una puerta de entrada. En este caso, eso sí, es una puerta de entrada a la ciudad y sirve de paso a una de las avenidas más concurridas y bellas de todo Berlín: la Under der Linen. Aunque en realidad, más que una puerta son cinco puertas en una que le otorgan majestuosidad al monumento.
Arco de Constantino en Roma
El Arco de Constantino se construyó en el año 315 para conmemorar la victoria de Constantino el Grande en la batalla del Puente Milvio, en la que había luchado. Tiene 21 metros de alto y está hecho con mármol blanco y ladrillo. Quizá no es tan imponente como otros, pero su antigüedad y sus alrededores –está situado junto al Colisseo de Roma– lo convierten en un lugar que debes visitar.
Puerta de Alcalá de Madrid
Situada en la Plaza de la Independencia, la Puerta de Alcalá de Madrid fue construida en el siglo XVIII. Es una de las cinco puertas reales que permitían el acceso a la capital española y a su vez, uno de los símbolos de la ciudad.