Viaje pictórico y cubista
Pablo Picasso nació en Málaga, vivió en Barcelona pero la mayor parte de su vida la pasó en Francia. Este país fue su mayor inspiración, así que es hora de recorrerla a través de sus ojos y su historia.
Pablo Picasso ha sido y será siempre uno de los grandes referentes artísticos de España. Nació en Málaga en 1881, pero creció en Barcelona hasta que se mudó a Francia. Es en este país donde realmente se consagró como uno de los artistas más importantes e influyentes de todo el siglo XX. Y, siendo honestos, no es para menos.
Fue con tan solo 19 años cuando Pablo Picasso llegó, por primera vez, a la ciudad de París. Eso sí, hasta 1904 no llegó a establecer su residencia permanente en la capital de Francia, concretamente en el distrito de Montmartre. Como curiosidad y a diferencia de un gran número de artistas, Pablo permaneció en París durante la conocida como ocupación alemana. Cabe destacar que unos cuantos años después, desde 1946 hasta que falleció, vivió en la zona sur de Francia. Con lo cual, nos decidimos a recorrer este país a través de su historia.
París
Una de las peculiaridades de Pablo Picasso, a su llegada a la ciudad en 1904, es su instalación en el mítico edificio Bateau-Lavoire. Es tremendamente famoso en la historia del arte, ya que es un lugar en el que se reunieron numerosos artistas de principios del siglo XX. Está ubicado, concretamente, en el número 13 de la conocida Rue Ravignan, en la Place Emile Goudeau. Es decir, justo debajo de la Place du Tertre.
La capital de Francia, por aquel entonces, era muy bohemia. Eso influenció mucho a Picasso, tanto en su vida como en su trayectoria profesional. Como dato, un incendio destruyó gran parte del edificio en 1970. Tan solo 8 años después, se decidió reconstruir de manera total y completa. Era evidente que un símbolo del arte en el siglo XX no podía quedar destruido.
Guernica: Picasso pintó esta gran obra de arte, que representa la destrucción de este pueblo vasco tras las bombas nazis, en el Hôtel de Savoie. En muy raras ocasiones, Pablo dejaba que “extraños” visitaran su estudio mientras estaba trabajando. En esta ocasión, permitió que algunos periodistas observaran el progreso de esa obra. Esta publicidad creía que ayudaría a la causa antifascista. Este trabajo le llevó un total de 35 días, ya que fue terminada el 4 de junio del año 1937.
Su creación fue para formar parte del conocido como “Pabellón Español” de la histórica Exposición Internacional de París que tuvo lugar en 1937. Con lo cual, el lugar en el que primeramente se expulso esta obra de Pablo Picasso fue el Palacio de Chaillot. Actualmente, podrás disfrutar de este cuadro en el Museo Reina Sofía de Madrid.
Museo Picasso, París: La capital francesa, como no podía ser de otra manera, cuenta con un espectacular museo dedicado al artista malagueño. Está ubicado en el Distrito de Marais y cuenta con unas 5.000 obras, aproximadamente. Desde 'Hombre con mandolina' hasta 'Hombre con guitarra', se pueden disfrutar de numerosas pinturas de guerra o diversas esculturas.
La Costa Azul
El sur de Francia aún sigue teniendo muy presente la huella que dejó en ellos el artista malagueño. Por ese mismo motivo, para descubrir Francia a través de los ojos de Picasso no podemos olvidarnos de estos destinos en concreto.
Antibes: El Palacio Grimaldi es uno de los lugares más característicos, porque desde ese lugar se pueden contemplar las brillantes aguas de su bahía. Es un lugar realmente precioso para que haya un museo y, en efecto, dentro de ese castillo hay algunas obras de Picasso. En 1946, tanto él como Françoise Gilot se quedaron cerca de ese lugar, concretamente en Golfe-Juan. Era una de las épocas más creativas del artista. Se llegan a contabilizar unas 23 pinturas y, aproximadamente, 44 dibujos. Allí encontramos el Museo de Antibes, o el Museo de Picasso, que se convirtió en el primer espacio de exposiciones que se dedicó al artista.
Vallauris: El malagueño también vivió en este pequeño pueblo costero en el que aprendió el espectacular arte de la cerámica decorativa. Tanto es así que en 1952 llegó a pintar su famosísimo mural sobre la guerra y la paz, con el fin de decorar la capilla románica del castillo del pueblo. Es una auténtica obra de arte que, a día de hoy, sigue causando muchísima sensación.
Cannes: Este lugar inspiró a Pablo Picasso a la hora de crear sus obras más conocidas, tales como el estudio de 'Las Meninas' así como 'Las 9 telas sobre las Palomas'. Este último proyecto se encuentra en la Fundación Picasso de Barcelona. La casa, ubicada en la Costebelle Avenue, en el número 22, tiene unas vistas increíbles hacia la bahía de Cannes. Pablo compró esta villa en 1955 y se mudó allí hasta 1961. En ese mismo año se construyó un edificio que ocultaba esa vista al mar que tanto le inspiraba. Por ese mismo motivo, se trasladó hasta Mougins donde disfrutó de sus últimos años de vida.