TREKKING AL AUSANGATE
Conocer Perú desde el lado menos convencional, con una impresionante aventura que cada día gana más adeptos: una caminata que atraviesa un paisaje asombroso, y que es ya, para muchos, una experiencia única en el mundo.
Si eres de los que viajan buscando emociones nuevas, caminos casi inexplorados, rutas donde la naturaleza va de la mano de la cultura y de a los que les gusta emprender rutas de senderismo cuando viajas, no puedes perderte esta exigente caminata alrededor del nevado perpetuo del Ausangate. Trekking al Ausangate, una montaña sagrada, a la que se le atribuye el origen del agua.
Sus habitantes ofrecen ceremonias rituales como el pago a la tierra, lo que enriquece mucho más aun esta aventura.
De octubre a abril es la mejor época para realizarla, así que ¡ve preparando la mochila! Ausangate es una montaña situada a unos 100 kilómetros al sudeste de la ciudad del Cusco con una altitud máxima es de 6.384 metros sobre el nivel del mar.
Así que conviene, antes de emprender esta aventura, aclimatarse previamente. Y hacerlo con una estancia de 4 o 5 días en Cusco, algo que por otra parte agradecerás. El nevado está a más de 6.000 metros de altura, una altitud para la que hay que prepararse. Y de todas maneras Cusco bien merece una visita. Esta mística ciudad sagrada es una ciudad bellísima. Impresiona su catedral, la Plaza de Armas; y además es el punto de partida para cualquier visita a la famosa ciudadela de Machu Picchu.
Y ya después de unos días en la ciudad, comenzamos la ruta del Ausangate, una ruta de varios días que destaca por la singular belleza de sus paisajes y que transcurre entre lagunas, pozas de aguas termales, glaciares, valles repletos de llamas y vicuñas silvestres, además de por cañones y espectaculares nevados.
El primer día la ruta es el que va de Cusco a Chillca, visitando el templo colonial Checacupe, el valle de Pitumarca y el espectacular cañón de Japura.
El segundo día transcurre por el amplio valle de Pampa Uyuni con espectaculares vistas a los majestuosos glaciares situados encima de la llanura. Un camino que se va estrechando a medida que nos acercamos a las cascadas que descienden de la montaña Santa Catalina. Una vez en la laguna de Paloma, el paisaje se ve salpicado de llamas y alpacas.
El tercer día de trekking y después de un exigente ascenso al paso de Palomani, bajaremos hasta la laguna Ausangatecocha desde donde las vistas al glaciar de la parte sur del “Apu” son impresionantes.
Y una de las partes más espectaculares del camino es por la que se transcurre el cuarto día, cuando el camino nos lleva hacia Vinicunca, una increíble montaña multicolor con estratos rojos, amarillos, ocre, gris y azul, entre otros, una peculiar pigmentación relacionada con la presencia de piedras y minerales sedimentarios y que hoy en día es una de las más famosas, visitadas y fotografiadas de Perú.
También es el lugar ideal para observar los grupos de “vicuñas” silvestres que habitan en estos parajes aislados. Y por último, y después de un breve ascenso final al paso de Anta, en esta jornada descubriremos un paisaje que cambia rápidamente y que que va desde las rojas formaciones areniscas hasta montañas erosionadas de calizas que forman un bosque único de piedra.
Sin duda, una excusa más que perfecta para visitar Perú y conocerlo desde lo más alto. Solo tienes que atreverte a probar.
También te puede interesar