GASTRONOMÍA
En pleno barrio de Salamanca hay un restaurante japonés llamado Tora cuyo menú Omakse tiene lista de espera y está recomendado en la guía Michelin por segundo año consecutivo. Te contamos todo lo que sabemos sobre esta experiencia para todos los sentidos.
La capital es una cuidad repleta de muchos lugares por descubrir y no hablamos solo de su cultura o de sus monumentos, sino también de su gastronomía. Y cada día en Viajestic nos gusta enseñarte nuevos restaurantes que no te puedes perder si eres de esas personas a las que les gusta comer.
Hablamos de Tora un restaurante ubicado en la calle de Padilla 5 (en el barrio de Salamanca) y que es el primer proyecto del futbolista Mario Hermoso. Destaca, principalmente, por su menú Omakase, una experiencia tan única que si quieres reservar tienes que apuntarte a su lista de espera.
Por si no fuera poco, este menú está recomendado en la guía Michelin por segundo año consecutivo y solo tiene espacio para 10 comensales, lo que hace de la cena o la comida algo mucho más exclusivo.
El chef de este menú Omakase (que significa "lo dejo en ti" o "lo dejo en tus manos"), es José Osuna, un cocinero que se ha labrado su éxito gracias a su esfuerzo, pues es autodidacta y nunca ha pisado una escuela de hostelería.
El menú Omakse de Tora consta de 17 pases que comienza con tres entrantes, dos de ellos calientes que son una crema de cebolla con huevas de salmón, furikake de sisho y trufa y una sopa de vieira con setas enoki y miso cítrica.
El siguiente plato es un increíble tartar de toro con yema de huevo de corral y salsa ponzu que te dejará sin aire. y después se daba paso a una selección espectacular de nigiris, mientras se crea una experiencia en el paladar mezclando texturas, sabores y las distintas grasas de los pescados, siempre variando según la temporada.
De los nigiris, todos espectaculares, queremos destacar el niguiri de gamba roja y pimiento de Padrón, el nigiri de otoro tostado y vieira, el niguiri de atún con grasa de Wagyu A5 y caviar y el niguiri de foie. Eso sí, la experiencia para el paladar llegó con el niguiri de calamar y wasabi que, en propias palabras del chef, cuando lo masticas "aparece una sensación de picor extremo en nariz, que sube a los ojos y después se te saltan las lágrimas durante 5 o 6 segundos".
El menú acaba con un clásico temaki de atún japonés y por último con un postre. Si quieres hacer la experiencia más completa puedes acompañar tu Omakase con un maridaje de bebidas. El precio es de 95€ para cenas, bebida no incluida, y a mediodía el precio es de 45€.