Nos alimentan, nos matan y nos salvan la vida: el libro que te abrirá la puerta al mundo mágico de los hongos
'La magia de los hongos', de Sandra Lawrence, es es un alucinante viaje literario que nos invita a descubrir unos de los seres vivos más increíbles, variados y desconocidos que viven con nosotros.
Viven en nuestro refranero: "En abril, setas a mil", "en junio, setas a puño", "cuando en octubre llueve, el níscalo se mueve". Dicen con sorna los que saben de esto que todas las setas se comen, algunas solo una vez.
El misterio de los hongos
Los hongos son unos de los seres vivos más misteriosos que pueblan la Tierra. Solo en nuestro cuerpo damos cobijo a unos 80 tipos diferentes.
Ingrediente habitual de la cocina mediterránea, con levadura (un hongo) fabricamos pan y cerveza. Van de lo más exquisito, como las trufas (otro hongo) de la toscana por las que se llegan a pagar 300.000 euros, a lo más peligroso. La Amanita Phalloides (hongo, por supuesto) ha sido muy utilizada como arma homicida. Mortal de necesidad, pero de efecto retardado, así que es difícil asociar su ingesta a la muerte de la víctima.
Muerte, vida y vida extra
No existió jamás maldición de Tutankamón, fueron los hongos que respiraron al abrir la tumba los que mataron a sus descubridores. Hay otros hongos que matan pero mantienen vivo al huésped para seguir reproduciéndose. El cordyceps inspiró 'The last of us' y, curiosamente, otro hongo nos han servido parar salvarnos la vida: larga vida a la penicilina.
Y es que nos rodean tanto desde tiempos tan antiguos que los hemos integrado también en la cultura popular. Los hongos de Super Mario Bros nos dan energía, eran el hogar de los Pitufos, la cama de la oruga que instruía a Alicia en el País de las Maravillas e incluso hay representaciones de Adán y Eva en las que el árbol del conocimiento del bien y del mal es una seta.
Aplicaciones infinitas
Les hemos otorgado un carácter mágico también. Holanda ha hecho buen negocio de aquello y hay más de un adulto que estará de acuerdo con esto. Y los hay que lucen en la oscuridad. Aristóteles lo llamó fuego frío y murió sin descubrir su mecanismo. En Chernóbil se encontró un tipo de hongo que cambia la radiación por energía y ahora la NASA busca su aplicación en Marte, aplicando ese poder a los trajes de los astronautas para evitar la radiación.
Si echan cuentas, en este reportaje no les hemos hablado de más de una docena de especies. Sandra Lawrence, escritora y experta en botánica disecciona en 'La magia de los hongos' cien de ellas. Sin embargo, la ciencia ha descrito 148.000 especies diferentes. Pero es que todavía hay más de dos millones de las que no sabemos nada.