EN BUSCA DE SU CUARTO TRIUNFO DEL AÑO
El abandono de Sébastien Ogier en el bucle matinal llevaba a que las opciones de que Toyota GAZOO Racing consiga uno de los títulos se hayan prácticamente esfumado por completo, siendo la opción de vencer en constructores algo más viable que la de pilotos.
Jornada de locos la vivida este sábado en el Rally de Chile. Si bien la etapa del viernes había terminado en teoría con liderato de Ott Tänak, la realidad es que ya adentrados en la madrugada española, llegó la confirmación de que los tiempos nocionales atribuidos después de la neutralización del TC1 situaban a Elfyn Evans como líder provisional de la prueba sudamericana.
Con esa realidad comenzó una segunda etapa en la que poco a poco se han ido clarificando la lucha por el campeonato del Mundo, especialmente el de pilotos, donde los hombres de Hyundai han dado un gran paso al frente después del abandono de Sébastien Ogier durante el bucle matinal. El francés se ceñía mucho en una curva de derechas y a pesar de que en los reconocimientos había visto una piedra de grandes dimensiones, esta vez el impacto con su Toyota GR Yaris Rally1 deparó la rotura de los tornillos del brazo de dirección y el abandono de esta jornada del sábado para el ocho veces Campeón del WRC.
El de Gap reconocía que se estaba despidiendo prácticamente con esta retirada de las opciones de su noveno título, mientras que Thierry Neuville fue poco a poco remontando posiciones para superar a Grégoire Munster primero y posteriormente a Sami Pajari, terminando el día muy cerca de la tercera posición que actualmente ocupa Ott Tänak, a 33,6 segundos de la cabeza de la carrera y 10,1 segundos por delante de su compañero de equipo y líder destacado de la general del campeonato.
Provisionalmente esto significaría un recorte de tres puntos por parte del Campeón del Mundo de 2019 a la renta que tiene Thierry, pero con dos pruebas por delante, parece un recorte por el momento insuficiente, siempre vinculado a que ambos terminen la jornada de mañana. Tendrá complicado Neuville coronarse aquí ya que precisa tener un margen de 61 puntos antes de regresar al Viejo Continente para disputar el Rally de Centroeuropa.
Mientras tanto, Toyota GAZOO Racing conserva a dos pilotos de fábrica al frente de la tabla de tiempos, aunque no en el mismo orden que como empezó el día. Elfyn Evans parecía estar listo para estirar su diferencia por encima de los 13,6 segundos que tenía de colchón tras el TC10 hasta que apareció la niebla. En dos tramos, Rovanperä fue capaz de endosarle 19,1 segundos para ponerse líder y posteriormente para distanciarse en busca de su cuarto triunfo del año al terminar el día con 15,1 segundos de diferencia sobre el galés, el cual se hundió con unas condiciones más complejas en cuanto a visibilidad.
En cuanto al resto, Sami Pajari cayó fuera del Top5 después de la llegada desde atrás de un Adrien Fourmaux que estaría peleando por el podio de no ser por la penalización de un minuto de este viernes. Grégoire Munster no está lejos de esa sexta plaza en la que se encuentra el joven finlandés de Toyota, con sólo 1,1 segundos entre ambos, mientras que a Pajari lo ha retrasado aún más una penalización de dos minutos por adelantarse en el control horario del TC11.
En WRC2, Nikolay Gryazin consiguió recuperar el liderato después de que Oliver Solberg pinchara en el penúltimo tramo y cayera relegado a la cuarta posición. El piloto sueco ha visto de golpe y porrazo complicarse ligeramente sus opciones de título y con un minuto de desventaja respecto al ruso y teniendo por delante a dos pilotos experimentados como Gus Greensmith y Yohan Rossel, ambos a más de 40 segundos.