La segunda carrera del Intercontinental GT Challenge habló español gracias a Miguel Molina
El piloto catalán venciójunto a los australianos Nick Foster y Tim Slade en el Ferrari de HubAuto Corsa.
Un par de australianos y un español que viajan a Estados Unidos y… no es el principio de un chiste malo, sino el comienzo de una historia que terminó con una victoria en una de las carreras de resistencia más importantes de GT’s de todo el mundo. La segunda carrera del IntercontinentalGT Challenge (campeonato mundial de carreras de larga duración para GT3 y GT4) disputada en el circuito de Laguna Seca tuvo una bonita sorpresa con la victoria del Ferrari número 23 del equipo taiwanés HubAuto Corsa en el que milita Miguel Molina. El catalán es piloto oficial de la marca italiana y fue ‘destinado’ a este coche para las 8 horas de California.
Quizás lo más remarcable de la historia es que ninguno de los tres pilotos que formaban el equipo había rodado nunca antes en Laguna Seca, de manera que esta carrera era el debut de tres pilotos que por otra parte tienen buena experiencia en el mundo de los GT’s. A lo largo de toda la prueba tanto Molina como sus compañeros, los australianos Nick Foster y Tim Slade, estuvieron impecables y no cometieron ningún error. El único problema encontrado durante el progreso de la carrera fue el fallo de una de las pistolas de aire durante una parada que les costó unos 20 segundos.
Claramente insuficiente para que cualquiera de sus rivales pudiera darles caza. Así, la carrera quedó inclinada del lado de HubAuto Corsa, que no estuvo hace dos meses en las 12 horas de Bathurst. El segundo puesto fue para el Mercedes AMG GT3 del equipo GruppeM de Raffaele Marciello, Maximilian Götz y Maximilian Buhk a solo quince segundos en una carrera que no tuvo ningún periodo de neutralización. Los tres pilotos son los nuevos líderes del campeonato gracias al segundo puesto obtenido también en la cita inaugural australiana.
La tercera y última posición del podio fue para el Porsche 911 GT3-R de Park Place con Romain Dumas, Sven Muller y Mathieu Jaminet al volante. La presencia de los Audi y BMW de los equipos WRT y Schnitzer respectivamente aseguró un top 5 sin repetición alguna de marca, mostrando la variedad y la igualdad que existe actualmente en el mundo de los GT3. Al estar el primer Nissan en novena posición final, ello pone a seis marcas distintas entre los diez primeros clasificados.
Molina no fue el único piloto español participante y es que a pesar de la ausencia de Andy Soucek en uno de los Bentley, la marca británica volvió a hablar castellano gracias al debut de Lucas Ordóñez con el Continental GT3. El madrileño empezó así su carrera lejos de Nissan, la marca con la que había estado asociado hasta la pasada temporada. Su primera carrera fue correcta y junto a Maxime Soulet y Markus Palttala, terminó en undécima posición sin muchos problemas. Volverá a estar en pista con uno de los coches ingleses en las 24 horas de Spa-Francorchamps, donde habrá más pilotos españoles en pista.
En las demás clases participantes hubo también varias historias, culminando con la victoria del Ford Mustang GT4 de PF Racing con Chad McCumbee, Jade Buford y James Pesek al volante. Finalmente, la clase GTC vio como vencedores a Miroslav Konopka, Andrzej Lewandowski y Zdeno Mikulasko en el Lamborghini Huracan Super Trofeo de ARC Bratislava al ser los únicos participantes en su clase. Lamentablemente, este año solo hubo 20 participantes por 32 de la edición del año pasado. El futuro de la carrera queda por lo tanto en el aire, aunque SRO asegura estar comprometido con ella. La próxima ronda del campeonato será las 24 horas de Spa-Francorchamps los días 27 y 28 de julio.