El
Infiniti Q50 es una berlina de tamaño medio que tiene la difícil tarea de plantar a rivales muy fuertes como los BMW Serie 3, Audi A4 y Mercedes Clase C. Para Europa recibe una mecánica diésel, un elemento de vital importancia si se quiere lograr una buena cuota de mercado.
Uno de los principales reclamos del Q50 es su diseño exterior. Además de muy elegante presume de unos trazos muy estudiados que aportan dinamismo y deportividad al conjunto, siendo reconocible al primer vistazo y muy personal.
Al menos por ahora sólo se ofrece con carrocería de cuatro puertas, si bien a lo largo del 2016 llegará una variante coupé denominada Q60.La calidad de realización en el interior es de las mejores del segmento, con plásticos de elevada calidad y unos ajustes impecables. La presentación también está a la altura, destacando el empleo de dos pantallas LCD de buen tamaño en la consola central para el control de los mandos principales. Las posibilidades de equipamiento son correctas para una berlina media aunque está un tanto por detrás de las que ofrece el trío alemán.
Entre lo más destacable hay que citar la alerta de cambio de carril, detector de objetos en ángulo muerto, control de crucero adaptativo, faros con tecnología LED, sistema de visión cenital, dirección adaptativa, alerta de tráfico cruzado en maniobras de marcha atrás, asientos ventilados, techo solar eléctrico, etc.
Los interesados en la conectividad encontrarán un completo equipo
con pantalla de ocho pulgadas con acceso a internet y a aplicaciones, bluetooth, disco duro, puerto USB, control por voz y radio digital. También puede tener un sistema de sonido de altas prestaciones con el sello Bose. En el momento de escribir estas líneas la gama del Q50 está formada por los niveles de acabado
Base, GT, GT Premium y GT Sport. La dotación en todos ellos es completa, con llantas de aleación, climatizador automático, control de crucero, bluetooth, llantas de aleación de 17 pulgadas y espejo interior fotosensible.
La oferta de motores está limitada a
un diésel de origen Mercedes con 2,2 litros que desarrolla 170 CV de potencia, y destaca por su buen nivel de prestaciones y unos consumos ajustados. Puede ir asociado a una caja de cambios manual de seis velocidades o bien con la automática de siete relaciones pero siempre con tracción posterior. La otra alternativa en la oferta es un híbrido que combina
un bloque de gasolina con seis cilindros y 3,5 litros que desarrolla 306 CV con otro eléctrico con 68 CV. La potencia total combinada se queda en los 364 CV y el
sistema de tracción total a las cuatro ruedas. Teniendo en cuenta el nivel de prestaciones, el consumo medio declarado de 6,2 L/100 es bastante contenido. En otros mercados europeos se ofrece una tercera opción equipada con un motor de
gasolina de dos litros con 211 CV que por el momento no se ofrece para España. El que sí llegará es el nuevo
3.0 V6 Bi-Turbo con 400 CV de altas prestaciones.