BARCELONA TOMA LA DELANTERA
Los vehículos más antiguos y contaminantes tienen las horas contadas en varias ciudades europeas, incluyendo alguna española: a partir de 2020 verán limitada su circulación
Parecía que, cuando se hablaba de planes de restricción para el tráfico, se hablaba de un futuro muy lejano que, sin embargo, está ya a la vuelta de la esquina: 2020 se postula como un año de cambios, de profundos cambios, cambios que están ya al caer y que afectarán a millones de personas dentro del ámbito del transporte, siendo los usuarios de vehículos antiguos los más perjudicados.
Y es que el cuidado y la preocupación por el medio ambiente está cada vez más presente en nuestro día a día, siendo el tráfico rodado el más afectado por las diferentes medidas que se están tomando para mejorar la limpieza y calidad del aire que todos respiramos. Parece que fue ayer, pero ya han pasado más de dos años desde que la DGT comenzó a repartir las primeras etiquetas para diferenciar el potencial contaminante de los vehículos en circulación, una acción que poco a poco ha ido tomando sentido.
2020 está a punto de llegar, y con él numerosas medidas que afectan a millones de conductores, cuyos vehículos dejarán de ser aptos para la circulación en determinadas zonas. Barcelona ha tomado la delantera: desde el 2 de enero de 2020 ningún vehículo de gasolina anterior al año 2000 o diésel anterior al año 2006 podrá circular por la ciudad, de 7:00 a 20:00 horas de lunes a viernes.
Madrid también se coloca como una de las zonas en las que los vehículos más antiguos tendrán más difícil la circulación: la actual APR de bajas emisiones, Madrid Central, se reconvertirá en Madrid 360, contando con medidas como la restricción de la circulación a los vehículos sin etiqueta ambiental dentro de la M-30 en episodios de alta contaminación. VER VIDEO.