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La oferta de vehículos actual es muy numerosa y variada. Aún así, actualmente hay una categoría que domina claramente: los SUV. Aunque este tipo de coches cuenta con múltiples variantes, ¿las conoces todas?
Afirmar que los SUV dominan el mercado del mundo del automóvil en la actualidad no es ninguna locura. Este segmento nos ha pillado a todos por sorpresa. Su crecimiento en los últimos años ha sido muy notorio. Prueba de ello es la cantidad de diferentes modelos que acaparan las novedades de las marcas y la cantidad de vehículos de esta categoría que vemos en nuestras carreteras.
Sin embargo, ¿sabemos qué es exactamente un SUV? El término SUV proviene de las siglas Sport Utility Vehicle(Vehículo Utilitario Deportivo) y es utilizado en aquellos automóviles que combinan elementos propios de un turismo convencional y de un todoterreno. En lo estético, este segmento luce como si fuese un todocamino, aunque en cuanto a cualidades se refiere, está más orientado al asfalto.
Los primeros coches SUV aparecieron tal y como los conocemos hoy en día en la década de los 90 como resultado del deseo de los conductores de disponer de vehículos grandes que no tuviesen las dificultades que suponen los todoterrenos. De esta manera nació esta especie de híbrido, y no nos referimos a la motorización, entre turismo y todocamino con maletero amplio, ruedas grandes y una estética que invita a la aventura.
La complejidad del mundo del automóvil ha llegado también, de manera inevitable, a los SUV. Este segmento ha pasado de ser muy simple en sus primeros años de vida a un quebradero de cabeza en la actualidad debido a la gran cantidad de subcategorías que encontramos en él. Desde Centímetros Cúbicos pretendemos arrojar luz sobre un segmento que las marcas han plagado de variantes.
Los A-SUV son los primeros que encontramos dentro de este segmento, aunque fácilmente podría quedarse fuera puesto que estos nos son más que automóviles urbanos con aspecto de todoterreno. Una apariencia de todoterreno justificada por su carrocería elevado con respecto al asfalto, pasos de rueda o contar con portaequipaje en el techo.
La longitud de esta subcategoría es inferior a los cuatro metros con una motorización que rara vez supera los 100 CV de potencia. Incluso, muchos de ellos podemos encontrarlos con motores atmosféricos de tres cilindros. Su precio oscila entre los 10.000 y los 15.000 euros. Un claro ejemplo de A-SUV sería el Volkswagen CrossUp.
Por su parte, un segmento muy de moda es el B-SUV que con una medida de entre 4 y 4,25 metros podría situarse en la misma categoría que los hatchback compactos. Sin embargo, sus plataformas provienen de subcompactos, por lo tanto se corresponde con el segmento B.
Sus potencias suelen estar en torno a los 120-140 CV de potencia. El segmento B-SUV se inició en 2010 con el modelo Nissan Juke, el que marcó el camino hacia una imagen relacionada con un tipo de población más joven y moderno.
Los C-SUV tienen una longitud de entre 4,4 hasta 4,7 metros. La motorización de este segmento es generalmente de cuatro cilindros con una potencia que ronda los 250 CV de potencia. Esta clase de vehículo está pensado para la familia, concretamente para transportar a varios integrantes con comodidad, seguridad y entretenimiento.
La tercera fila de asientos que incluyen algunos modelos puede reducir el espacio del maletero, aunque esto tiene fácil solución ya que esta fila suele ser abatible. El Toyota Rav 4 o el Seat Tarraco son algunos de los coches que podemos encontrar en este segmento C.
Siguiendo con la clasificación de los SUV, encontramos ahora el D-SUV o SUV medianas que cuentan ya con espacio para siete u ocho pasajeros. Estos modelos suelen construidos sobre la base de sedanes grandes con unos motores V6 o de cuatro cilindros turbo. El lujo y la comodidad son dos de las características principales de esta categoría.
La longitud de este segmento se encuentra entre los 4,7 y los 5 metros. Alguno de los modelos que podemos encontrar dentro de esta subcategoría son el Lexus LX 570, el Kia Sorento o el Toyota Highlander.
Si un SUV supera los 5 metros de largo, este se encuentra dentro de este segmento. Estos suelen ser una auténtica apuesta por el lujo, como si de auténticos salones con ruedas se tratase. En la mayoría de las ocasiones cargan unos motores V8, aunque también existan algunos modelos que opten por la opción V6 turbo.
Los precios de los SUV grandes suelen estar dirigidos hacia un público con un gran poder adquisitivo, puesto que no disminuyen de los 50.000 euros. Algunos modelos que cumplen estas características son el Ford Expedition, el Mercedes GLS o el Rolls Royce Cullinan.
Como hemos mencionado al principio, la moda de los SUV ha llevado a la marcas a colmar de este tipo de modelos sus catálogos. Prueba de ello es la invención de un SUV cabrio. Este es el caso del Volkswagen T-Roc Cabrio, un modelo de 1,5 metros de alto y 4,2 metros de largo con cuatro plazas y 280 litros de maletero.
En España, el precio para hacerse con este modelo empieza a partir de los 37.045 euros para el acabado Style. No obstante, si quieres un nivel de equipamiento R-Line la cifra aumenta hasta los 45.090 euros. Nada mal si tienes en cuenta que te estás haciendo con el descapotable más vendido de Europa.