Ya están a la venta sin etiqueta ECO
Las gamas Audi SQ7 y Audi SQ8 se amplían con una mecánica de gasolina V8 TFSI que desarrolla 507 CV y 770 Nm de par. El SQ7 TFSI tiene un precio de partida de 115.160 euros y el SQ8 TFSI parte de los 122.930 euros.
Hace algo más de un año, Audi sorprendió a propios y extraños presentando el Audi SQ7 TDI, una variante deportiva de su todocamino de mayor envergadura que utilizaba un motor V8 TDI biturbo de 435 CV. Desde entonces, varios modelos de la gama S de Audi se han pasado al diésel, demostrando que las prestaciones no están reñidas con los consumos contenidos, pero dejando claro también que las sensaciones de un motor de gasolina de alto rendimiento están a años luz de las que se consiguen con cualquier diésel, por potente que sea.
Pues bien, parece que en Ingolstadt se han dado cuenta de ello y han decidido ampliar las gamas Audi SQ7 y Audi SQ8 con una versión de gasolina que monta un V8 TFSI biturbo de 4.0 litros. Se trata del mismo propulsor que emplea el Audi RSQ8 de 600 CV, pero en este caso se conforma con 507 CV y un par máximo de 770 Nm, ayudado en todo momento por una caja de cambios automática de convertidor de par tiptronic con ocho velocidades y un sistema de tracción total quattro.
Aunque no llegan al nivel del RS Q8 –conviene recordar que no existe el RS Q7– prometen ofrecer un comportamiento más deportivo que los TDI, sonar mejor, pesar prácticamente 200 kilos menos y mejorar sensiblemente sus prestaciones. De hecho, ambos necesitan 4,1 segundos para alcanzar los 100 km/h desde parado, casi un segundo menos que los diésel, mientras que su velocidad máxima está limitada electrónicamente a 250 km/h.
De serie, también incluyen suspensión neumática deportiva y dirección a las cuatro ruedas para moverse con soltura en cualquier situación. Opcionalmente, pueden ser todavía más efectivos con el diferencial deportivo del paquete de suspensión advanced, que reparte el par entre las ruedas del eje trasero mediante un control vectorial del par para mejorar la motricidad en curvas. Otro elemento opcional es el sistema electromecánico de estabilización activa del balanceo, denominado eAWS; su fnción es reducir el balanceo de la carrocería mediante dos motores ubicados en cada barra estabilizadora.
Lo que no tienen, a diferencia de los SQ7 Y SQ8 TDI, es un sistema de hibridación ligera con red eléctrica de 48 voltios, por lo que no cuentan con la etiqueta medioambiental ECO de la DGT, sino que se conforman con el distintivo C de color verde. También consumen más combustible, puesto que el SQ7 TFSI homologa una media de entre 11,9 y 12,5 l/100 km y el SQ8 TFSI consume entre 12,6 y 12,8 l/100 km.
Por lo demás, tienen el mismo diseño deportivo que sus hermanos diésel y comparten un equipamiento que incluye, entre otras cosas, faros HD Matrix LED –opcionalmente pueden ser láser–, un equipo de sonido firmado por Bang & Olufsen, servicios conectados, equipo de infoentretenimiento MMI Navegación plus y un completo paquete de asistentes a la conducción en el que figura el nuevo asistente de maniobras. Los dos modelos están ya a la venta, con una tarifa que arranca en 115.160 euros si hablamos del Audi SQ7 TFSI y en 122.930 euros en el caso del SQ8 TFSI.