Centímetros Cúbicos
Descubriendo el Jaguar XE, la alternativa 'british' a las berlinas alemanas
Jaguarvivió una especie de renacimiento a mediados de los 2000. Pasó de ser una marca con una imagen algo desfasada y poco atractiva, a crear nuevos modelos. Se trabajó en el diseño y la tecnología. La intención: llegar a más gente y, además, no hacerlo a cualquier precio. Dentro de la firma británica hacía falta una berlina de categoría superior, pero con versiones de acceso más asequibles.
Hasta ese momento la gama estaba formada por el XF, un modelo elegante pero que resultaba muy grande para determinadas personas y el XJ, el gran coche de representación. Pero la competencia era mucha y había que crecer, aun así, estos tres modelos sirvieron para dar el pistoletazo de salida a lo que supondría una verdadera revolución. A este cambio de imagen ayudaron el espectacular CX-75, que conmemoró el 75 aniversario y el , heredero directo del E-Type; con ellos se aseguraban un hueco en las paredes de los dormitorios de muchos jóvenes alrededor del mundo. Había que llamar la atención de aquellos que se habían olvidado de Jaguar.
Además, empezaba a asomar la cabeza el primer SUV de la marca y que hoy se ha materializado en el E-Pace. Pero seguía faltando ese coche al que más gente pudiese aspirar. Y ahí entraba en juego el ES. Un sedán, con capacidad para la familia, deportividad para la diversión y un diseño llamativo. Un modelo Premium, en la línea de la marca, pero que se pudiese disfrutar en el día a día. Rival directo de los Serie 3, Clase C y A4. Un modelo con el que Jaguar desembarcaba en un segmento nuevo.
Sus variantes lujosas siempre han sido muy lujosas. Sus versiones deportivas, eran muy deportivas… Se trataba de hacer algo más pequeño, lujoso y deportivo. Todo al mismo tiempo. El diseño, obra de Ian Callum y su equipo, ha sido muy aplaudido, pero además de bonito; es eficiente. Con él han logrado el mejor registro aerodinámico entre sus compañeros. La consecuencia directa se ha reflejado en una reducción del consumo de combustible y emisiones de CO2. Una reducción que no sólo se ciñe cuando el coche rueda por la calle, sino que comienza en el proceso de fabricación ya que, por ejemplo, el aluminio que se utiliza es reciclado y además se emplean los robots más avanzados en la línea de montaje.
Este fantástico chasis, unido a la amplia gama de motores y la propulsión trasera son un claro rasgo de los modelos más deportivos, y de los encargados de asegurar buenas sensaciones al volante. Diseño, tecnología y prestaciones. Esta es la carta de presentación del modelo de acceso de Jaguar. Un peso pesado decidido a inclinar la balanza del lado opuesto a las clásicas marcas germanas.