En ocasiones, un simple despiste puede desembocar en una multa de tráfico
Hay muchos factores que intervienen en la conducción. Por eso, un simple despiste puede suponer un problema a la hora de conducir. Aquí tienes 5 despistes que pueden acarrear multa.
Conducir es algo muy serio. Desgraciadamente, no siempre nos damos cuenta ni somos conscientes de que cada vez que conducimos, nos ponemos a los mandos de aparatos muy pesados, que alcanzan altas velocidades y que pueden provocar accidentes muy graves. Por eso, un simple despiste puede tener graves consecuencias. Aquí tienes cinco que pueden, además, acarrear una sanción económica:
1. NO LLEVAR CHALECO Y TRIÁNGULOS
En caso de avería, actuar con rapidez es básico, haciendo saber al resto de conductores que nos encontramos en una situación de emergencia. Para ello, es importante hacerse ver con chalecos reflectantes y triángulos de emergencia. Si no llevamos éstos elementos en nuestro vehículo, nos enfrentamos a una sanción de hasta 200 euros.
2. QUEDARSE SIN GASOLINA
Quedarse sin combustible es uno de los despistes más frecuentes y, a la vez, más peligrosos. Si nuestro vehículo se queda sin combustible en marcha, perderemos la asistencia del motor en dirección y frenos, pudiendo incluso perder el control del vehículo. Así, nos enfrentamos también a una sanción de 200 euros.
3. OLVIDARSE EL CARNET
Conducir debidamente identificado es obligatorio. Aunque las autoridades pueden comprobar tu identidad en tiempo real mediante sistemas telemáticos, aún a día de hoy conducir sin el permiso encima supone una sanción que puede alcanzar los 100 euros, aunque en la práctica rara vez supera los 10 euros.
4. NO DAR EL INTERMITENTE
El intermitente es uno de los componentes de seguridad más importantes de nuestro coche, sencillamente porque se encarga de hacer saber al resto de usuarios de la vía nuestros movimientos en la carretera. En ocasiones no nos acordamos de usar el intermitente, lo que puede provocar un accidente y, además, recibir una sanción de hasta 200 euros.
5. NO LLEVAR LA DOCUMENTACIÓN
La documentación es básica para identificar nuestro vehículo. Por eso, es obligatorio contar con el permiso de circulación y la ficha técnica cuando circulamos, siendo además recomendable llevar con nosotros el último recibo del seguro. No hacerlo nos expone a una sanción de hasta 200 euros.