HOMENAJE AL DEBUT EN EL WRC
Únicamente habrá 25 unidades, todas ellas construidas en Banbury, la sede de Prodrive en Reino Unido
Se trata sin lugar a dudas de uno de los modelos más icónicos del Mundial de Rallies. Ha pasado ya un cuarto de siglo desde que debutara el primer WRC de la firma de las estrellas y en ello tuvo mucho que ver el preparador de competición Prodrive, dirigido por David Richards en los distintos proyectos que han encarado los de Banbury desde la década de los ochenta.
El Subaru Impreza 22B se convirtió automáticamente en uno de los coches más queridos por los aficionados gracias a sus musculosas formas y a su espectacular alerón trasero. Prácticamente todos los fans que plagaban las cunetas en los rallies mundialistas de finales de los noventa todavía pueden distinguir el bello sonido de esa centella azul que se cruzaba antes de afrontar cada curva.
Ahora Prodrive quiere rendir un homenaje al que ellos han denominado como “posiblemente el Impreza más icónico”, justo 25 años después de que la versión World Rally Car hiciera su debut. Más potente, más ligero y con un mejor manejo. El Prodrive P25 pasará a contar en esta ocasión con un motor bóxer de cuatro cilindros y 2,5 litros que producirá más de 400 CV, una caja de cambios semiautomática de seis velocidades con levas detrás del volante, la cual evidentemente se asemeja mucho más a la siguiente generación de WRC que a la primera, los que fueron sucesores de los Grupo A, los cuales comenzaron a trabajar con el joystick secuencial.
El empleo de forma masiva de fibra de carbono, no restringidos por la normativa técnica que tenían los primeros WRC 2.0 turbo, permite también bajar significativamente el peso del conjunto, todo ello a pesar de que no se ha confirmado el dato final del conjunto. En total serán 25 unidades las que se construirán en las instalaciones de Banbury, Reino Unido, un complejo ampliamente renovado durante los últimos años que está actualmente encargándose del proyecto BRX Hunter T1+ y su propia versión de calle.
Peter Stevens, el encargado de diseñar el Subaru Impreza WRC 22B original está siendo el encargado de darle unos pequeños toques modernos al diseño, mientras que David Lapworth, el cual sigue enrolado fielmente en las filas de Prodrive, se está encargando de la supervisión del departamento técnico.
El P25 es idea del propio presidente de Prodrive, David Richards: “El 22B Impreza original se considera el más icónico de los Subaru y es muy buscado. Queríamos mejorar todo lo que hizo que ese automóvil fuera tan especial aplicando la última tecnología para crear nuestra propia interpretación moderna de un automóvil que se estableció en un lugar en la historia del automovilismo”.
La primera vez que el Prodrive P25 debutará en público será el próximo mes de junio, durante el Festival de la Velocidad de Goodwood y se espera que el primero de los vehículos destinados a clientes sea entregado a finales de este mismo año.
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