La magia de Lamine Yamal guía a España en la noche de los penaltis ante Brasil

Lamine Yamal por un lado, Endrick por el otro. Son dos de los jóvenes con más futuro en el mundo del fútbol. Uno ya brilla en el Barça, el otro llegará al Real Madrid el próximo verano. Los dos dejaron muchos detalles en el amistoso que disputaron España y Brasil en el Bernabéu. El encuentro, después de tres penaltis, finalizó con el marcador de 3-3.

El seleccionador puso de inicio un equipo que perfectamente podría ser titular en la Eurocopa. Con Lamine Yamal y Nico Williams por las bandas, Dani Olmo de enganche y como delantero Álvaro Morata. Más dudas podría haber en la defensa, donde los titulares siguen sin estar claro. Pero arriba el equipo español brilló.

Lo hicieron en los costados Yamal y Nico. Y el primero forzó el penalti que adelantó al cuadro español en el Bernabéu. Rodri, capitán esta noche, disparó fuerte y al centro para inaugurar el marcador. Muy superiores los chicos de rojo en esos primeros instantes de encuentro.

Olmo se unió a la fiesta con una jugada espectacular. Regateó a todos y colocó la pelota en la escuadra de la portería de Bento, cuya estirada de nada sirvió.

Dominaba España. Con la pelota y presionando muy arriba. Pero en un error en la salida, Brasil acortó distancias. Unai Simón le entregó una pelota en la frontal a Rodrygo Goes y el atacante del Real Madrid sólo tuvo que poner la pelota por alto. No lo mereció el cuadro de Silvestre, pero se encontró ese tanto en casi la única llegada del acto inicial.

Y con los cambios de Brasil, el partido cambió por completo. Ahora España ya no disponía de la pelota como antes. Y la salida del joven Endrick despertó a la delantera brasileña. Precisamente el todavía adolescente delantero fue el encargado de poner las tablas: un disparo de primeras con la zurda que despistó a Unai Simón.

La polémica siguió con los penaltis. Después del de Yamal en la primera, el colegiado señaló un empujón sobre Dani Carvajal. Muy protestado por el cuadro de Brasil. Motivos tenían. Porque el empujón fue muy leve. Rodri volvió a acertar. Pero la historia de los penaltis no se había terminado ahí. A Carvajal, en el otro área, también le señalaron un penalti. Y Paquetá puso el empate final.