El Athletic consigue su pase a dieciseisavos de la Europa League tras ganar al Zorya

Aritz Aduriz y Raúl García, con sendos tantos a centro del capitán Markel Susaeta, metieron en Ucrania al Athletic Club en los dieciseisavos de final de la Liga Europa, en la que cerró la fase de grupos con un claro y merecido triunfo por 0-2 ante el Zorya Luhansk en Lviv.

Además, los de José Ángel 'Cuco' Ziganda han sido campeones de grupo aprovechando también el empate entre el Hertha y el Östersund sueco en Berlín. Así, el conjunto bilbaíno, que ha ganado los tres partidos de la segunda vuelta, será cabeza de serie en el sorteo del lunes de dieciseisavos de final y además jugará en esa ronda el partido de vuelta en casa.

Ha sido sin duda el partido más convincente del Athletic en lo que va de curso, ya que, además de marcar dos goles, se ha sobrepuesto a otro tanto mal anulado a Iñaki Williams y un remate de cabeza al larguero de Raúl García, en ambos casos todavía con 0-0. El de Aduriz es el decimotercero en lo que va de temporada, el octavo en una Liga Europa en la que lleva ya 28.

El de Raúl es el séptimo del curso, el tercero en Europa. Empezó el Athletic en el campo rival, aunque sin crear peligro y durante solo unos minutos en los que forzó un córner, ya que después se animó un poco el Zorya, que dominó otro rato y quiso probar por primera vez a Herrerín con un disparo muy desviado de Andriyevskiy en el minuto 12.

En busca del ansiado punto

Más atemorizó al conjunto bilbaíno una segunda llegada local, un centro desde la derecha de Gordienko, en el 20, que no pudo enganchar bien Karavaev en su incorporación desde atrás hasta el área pequeña. Otra jugada inmediatamente posterior, un disparó de Gromov entrando al área, la abortó Laporte despejando a córner.

Volvió a girar el choque y un error arbitral impidió al Athletic ponerse por delante en el marcador a la media hora de partido. Ya que Williams, a pase de Aduriz, marcó a puerta vacía y la jugada fue anulada por fuera de juego. La acción nació en un centro de Raúl García en la que ni Aduriz, que recibió primero, ni Williams, que remachó en el área pequeña, estaban en posición ilegal.

Aunque sí otro compañero por detrás de Aduriz que no llegó a participar en la jugada. Una preciosa chilena de Raúl desde la frontal, que se le marchó un poco arriba, fue la segunda ocasión del Athletic en una primera mitad floja de ambos equipos y en la que a Raúl se le fue desviado otro remate de volea.

Salió más decidido del descanso el Zorya, que buscó el área bilbaína y achuchó a los leones. Pero la primera ocasión fue del Athletic en una fantástica carrera desde campo propio de Aduriz que no acabó en gol por la buena intervención de Lunin. A pesar de sus ya casi 37 años, el ariete internacional fue deshaciéndose de todos los que salieron al paso por potencia y habilidad, y hasta acabó la jugada con un buen disparo.

El Athletic, muy superior

Dos cabezazos, de San José a saque del córner provocado por Aduriz y otro posterior de Raúl en un centro de Lekue, confirmaron la mayor peligrosidad del Athletic en la segunda mitad. Ahondó en ello Raúl García con otro testarazo, a saque de esquina de Susaeta, que se estrelló en el larguero en el minuto 64; y confirmó que el Athletic hacía más daño con un nuevo remate aéreo que, esta vez sí, abrió el marcador.

Fue un cabezazo muy arriba y muy acrobático entre dos rivales de Aduriz, que salió bombeado y superó la estirada de Lunin antes de entrar. En el centro, en un golpe franco, de Susaeta. Insistió el Athletic y Raúl estuvo a punto de marcar el 0-2 con otro remate de cabeza, a centro de Lekue, que milagrosamente sacó Lunin a córner con una parada excepcional.

Un mal remate de Kochergin fue la única medio ocasión que tuvo el Zorya en una segunda mitad que fue caminando hacia un triunfo claro del Athletic. Que lo rubricó con otro tanto a centro de Susaeta. Esta vez de Raúl García controlando el balón y buscando el huevo al que no podía llegar Lunin.

Fue tal la superioridad de los leones en la segunda mitad que, además de ganar con claridad, terminó el partido en campo rival y lanzando varios saques de esquina seguidos.