Las empresas toman medidas ante el coronavirus: Fujitsu anuncia un ERTE y Ericsson manda a sus empleados a casa

Las empresas con sede en España empiezan a notar las consecuencias del coronavirusy algunas ya están adoptando medidas para tratar de reducir el impacto de la crisis sanitaria. Así, la planta de Fujitsu en Málaga ha presentado un Expediente de Regulación de Empleo Temporal (ERTE) ante la falta de materiales provenientes de China.

Una medida que, se estima, afectará a 336 trabajadores y podría prolongarse durante más de dos meses: desde el 2 de marzo hasta el 17 de mayo. El presidente del Comité de Empresa, José Lozano, de Comisiones Obreras, y el delegado sindical de UGT en Fujitsu Ten, José María Amador, han precisado que la duración de la medida y el número de trabajadores afectados podrá variar "dependiendo de la falta real de componentes".

No obstante, Lozano ha advertido de que, al ser proveedores de la fábrica europea de Toyota, si esta "para porque otro proveedor le falla", su empresa también lo hará "de manera más generalizada". "Eso se espera que no ocurra porque sería lo peor", ha agregado.

Por su parte, la sede de Ericsson en Málaga también se ha visto obligada a tomar medidas ante el coronavirus, en su caso ante el temor a un posible contagio, tras la visita de una empleada de su sede de Croacia, donde un trabajador ha dado positivo. Por ello, la empresa tecnológica decidió que sus más de 200 trabajadores no acudieran a sus puestos de trabajo el miércoles y les pidió que teletrabajaran, de acuerdo con el diario 'Sur'.

Aerolíneas afectadas

Por otra parte, la aerolínea alemana Lufthansa ha anunciado un programa de ahorro de costes que incluye permisos no remunerados para sus empleados y la suspensión de nuevas contrataciones hasta nuevo aviso. La compañía aérea, que ha cancelado sus vuelos a China hasta finales de marzo, también ha suspendido los cursos de formación que tenía previstos hasta abril y estudia opciones de trabajo a tiempo parcial para sus trabajadores.

También la holandesa KLM ha anunciado un paquete de medidas de austeridad, que incluye una pausa en las inversiones y la congelación temporal de las contrataciones. Según medios holandeses, desde la empresa se ha pedido a los empleados que se tomen permisos y días de vacaciones ahora para recortar gastos, aunque un portavoz de KLM ha asegurado que estas medidas son "preventivas".