MONJES A LOS QUE SE LES ATRIBUYEN VIRTUDES MORALES Y UN HALO SAGRADO

Crean una base de datos de budas vivientes para luchar contra los fraudes

Con el fin de luchar contra la proliferación de personas que se hacen pasar por budas vivientes, las autoridades religiosas chinas han puesto en marcha una base de datos en internet para acabar con este fraude. Los budas falsos han amenazado la seguridad nacional, al usar dinero que recolectan en actividades ilegales o separatistas en el Tíbet.

Imagen que muestra a una mujer que reza delante de un buda viviente | EFE

Las autoridades religiosas chinas han puesto en marcha una base de datos de budas vivientes en internet con el fin de que todos estén registrados, a fin de luchar contra la proliferación de personas que se hacen pasar por ellos para estafar o según el Gobierno, para realizar actividades separatistas

Los internautas pueden consultar los nombres de budas vivientes en la web del gobierno regional tibetano y la de la Administración Estatal de Asuntos Religiosos.

Un primer grupo de 870 monjes han sido incluidos en la base de datos, con el objetivo de que a corto plazo quien no figure en ella sea considerado sospechoso de fraude. Los budas falsos han amenazado la seguridad nacional, al usar dinero que recolectan en actividades ilegales o separatistas en el Tíbet.

También se han dado casos de falsos budas vivientes que han cometido estafas incluso a algunas celebridades, como el actor Zhang Tielin, quien se había convertido en adepto a las enseñanzas de uno de estos timadores.

En la religión tibetana, un buda viviente es una persona que ha alcanzado el máximo grado de perfección en la rueda de la vida tras múltiples reencarnaciones, pero que en lugar de alcanzar el paraíso o nirvana continúa su forma terrenal, una creencia similar en algunos aspectos a la de los santos cristianos.

Algunos de estos budas vivientes han protagonizado inmolaciones en protesta por la fuerte represión que consideran, ejerce el régimen comunista chino contra el budismo en las zonas de población tibetana.

EFE | Pekín
| 18/01/2016

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