YANUKOVICH ES EL FAVORITO MIENTRAS TIMOSHENKO SIGUE ENCARCELADA
Los ucranianos acuden a las urnas con amenaza de irregularidades
El presidente ucraniano Victor Yanukovich, ha negado que se estén produciendo irregularidades durante la jornada electoral de este domingo. Tras depositar su voto ha declarado que "todo transcurre con normalidad".
Los comunistas y miembros de la opisición encabezada por la encarcelada ex primera ministra Yulia Timoshenko han denunciado irregularidades en las elecciones legislativas. Los comunistas han acusado al primer ministro de trasladar en autobuses a centenares de electores en las regiones de Zaparozhe y Donetsk para que voten en varios colegios a la vez.
Mientras tanto, el partido de Yulia Timoshenko, Betkivschina, ha declarado haber recibido denuncias de propaganda electoral ilícita, compra de votos y expulsión de observadores de los colegios. La ex primera ministra ha llamado a los ucranianos a votar masivamente para evitar el fraude oficialista.
Timoshenko lleva siete años en la cárcel acusada de abuso de poder, y a enviado un mensaje desde el hospital donde se encuentra convaleciente de una hernia discal.
Al respecto, el Gobierno ucraniano ha pedido a los observadores internacionales a que hagan un esfuerzo de objetividad, mientras el expresidente Leonid Kuchma se mostró convencido de que Occidente acabará por reconocer los resultados electorales.
Más de 36 millones de votantes son convocados a las urnas para elegir 450 diputados, la mitad por listas de partidos y el resto por circunscripciones mayoritarias.
Timoshenko sería el principal rival de Víctor Yanukóvich, el actual presidente y candidato a la reelección. La ex primera ministra ha denunciado agresiones e incluso envenenamiento. Su hija Eugenia lucha por su liberación.
Klischko, campeón del mundo de pesos pesados se sitúa por detrás de Yanukovich en las encuestas, siendo líder del partido "Golpe". Los encuestados opinan que pueda erradicar las continuas trifulcas en el parlamento, que dejan el prestigio de Ucrania por los suelos.
Para evitar críticas internacionales, las elecciones están siendo supervisadas por observadores de la OSCE. Estas elecciones decidirán si Ucrania continúa la senda que ha marcado Yanukovich durante los últimos años, o se abre a Europa, como desea la oposición.