MIENTRAS LOS GUARDIAS ORDENABAN EL TRÁFICO

Condenado el etarra Fanecas a 81 años por matar a 3 guardias civiles en 1980

La Audiencia Nacional ha condenado a 81 años de cárcel al etarra José Lorenzo Ayestarán Legorburu, alias Fanecas, por participar en el asesinato a tiros de tres guardias civiles en la localidad alavesa de Salvatierra, el 4 de octubre de 1980. También ha sido condenada este viernes la etarra Ohiana Mardaras a 29 años por un atentado contra la central de la radiotelevisión vasca en 2008.

El atentado se produjo cuando los agentes -el cabo primero José Vázquez Platas y los guardias Avelino Palma Brioa y Ángel Prado Mella- ordenaban el tráfico en el transcurso de una carrera ciclista que se iba a celebrar durante las fiestas patronales del pueblo.

En su sentencia, la sección tercera de la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional considera probado que Ayestarán y otros dos miembros del comando Axular ya condenados por estos hechos -Ignacio Aracama Mendía 'Makario' y Félix Alberto López de la Calle 'Mobutu', "de forma sorpresiva dispararon contra sus víctimas en la cabeza y en el tronco, dándose posteriormente a la fuga escondiéndose en un caserío de Salvatierra".

Los magistrados, Alfonso Guevara, Antonio Díaz Delgado y Clara Bayarri, aprecian alevosía porque el ataque fue por sorpresa y estaba perfectamente programado para evitar cualquier "reacción defensiva que pudiera provenir por parte de las víctimas". El tribunal fija una indemnización de 390.000 euros para las dos viudas que dejó ETA en este atentado, una de las cuáles estaba embarazada de cuatro meses cuando se produjeron los hechos y la otra tenía ya entonces dos hijos de dos y tres años.

Según el relato de hechos probados, Fanecas, Makario y Mobutu decidieron asesinar a los tres guardias civiles en la citada prueba ciclista, "tras un intento abortado en el mes de septiembre en la localidad Salinas de Leniz (Guipúzcoa)". Para ello, se pusieron en contacto con el entonces cura párroco de Salvatierra, Ismael Arrieta Pérez, que les informó sobre el lugar de salida de la carrera y que incluso les llegó a avisar de la modificación que se produjo finalmente de ese punto de partida.

Los tres terroristas, entre ellos José Lorenzo Ayestarán Legorburu, dispararon a cada uno de los tres miembros del instituto armado en la cabeza y en otras partes del cuerpo. Tras los hechos se dieron a la fuga hacia el puerto de Opacua, abandonando el Simca 1200 en el que iban en el camino de Vicuña de Alegría (Álava), donde les esperaba otra persona no enjuiciada en esta causa.

Precisamente, una de las principales pruebas cargo para condenarle han sido las huellas digitales del acusado encontradas en el vehículo en el que huyeron. El sumario por este atentado se reabrió en agosto de 2000, al aparecer nuevas pruebas contra Ayestarán, lo que motivó que se ordenará su busca y captura en noviembre de 2003, siendo finalmente detenido en Francia en 2010.

laSexta/ Noticias/ España