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Y ahora qué

Las dos vías del juez ante el borrado de mensajes del fiscal general: dar por concluida la investigación o solicitarlos a Meta

¿Y ahora qué? El juez tendrá que decidir si investiga los mensajes de altos cargos del Gobierno a Lobato y la inocencia del fiscal general del Estado tras conocerse que hubo un borrado de mensajes en marzo.

El juez tendrá que decidir sobre la inocencia del fiscal general del Estado, Álvaro García Ortiz, después de que el informe de la Guardia Civil reflejara que se habían encontrado "cero mensajes pertenecientes a cualquier tipo de aplicación de mensajería instantánea entre el 8 y el 14 de marzo" en los dispositivos incautados durante el registro de su despacho.

La Fiscalía ha insistido este viernes en la inocencia de Álvaro García Ortiz, que eliminó el contenido de la aplicación entre el 8 y el 14 de marzo, según han admitido, por una cuestión de seguridad.

Estos han informado de la existencia de una instrucción del Ministerio que pide "no almacenar indefinidamente documentos en los soportes digitales ni en las cuentas de correo electrónico", así como borrarlos "una vez que dejen de ser necesarios". En esta también se les pide asegurarse de que "no se quedan en la papelera".

Por lo que fuentes fiscales han justificado el borrado y han argumentado que siete meses después el Fiscal General era libre para eliminar los mensajes. Es por ello que el juez podría dar por terminada la investigación contra García Ortiz o bien intentar que un perito los recupere o solicitarlos a la empresa propietaria de WhatsApp, Meta.

Asimismo, el juez tendrá que investigar los mensajes que altos cargos del Gobierno enviaron al exsecretario general del PSOE de Madrid, Juan Lobato. En estos mensajes que enviaron a Lobato, le pedían que utilizara para hacer oposición a la presidenta madrileña el correo electrónico que Alberto González Amador, novio de Ayuso, envió a la Fiscalía con el objetivo de pedir un acuerdo y en el que reconocía sus delitos fiscales.

La petición procedía de Moncloa y Ferraz, tal y como reflejan los mensajes intercambiados entre el exsecretario general del PSOE y su jefe de gabinete, David del Campo, quien le escribió lo siguiente: "En Moncloa y en Ferraz quieren el máximo de ruido y jaleo".

Tras esto, el propio Lobato expresaba las presiones que estaba recibiendo por parte de Pilar Sánchez Acera, asesora de Moncloa. "Pilar quiere que yo saque el mail de la Fiscalía, que no ha salido, pero que lo saque yo. No puede ser", escribía en su aplicación de mansajes instantáneos, a lo que su jefe de gabinete le decía: "No lo hagas".

Sin embargo, esta petición no solo llegaba de la asesora de Moncloa, sino también del secretario de Estado de Comunicación, Francesc Vallès; del jefe de prensa del PSOE y de la directora de comunicación de la ministra de Vivienda. "Estos tres también me han escrito con lo mismo", decía en un WhatsApp David del Campo a Lobato.