Los hospitales vuelven a estar al límite: los ingresos se triplican y las UCI siguen llenándose

Tras la explosión de contagios y la saturación de la atención primaria, las urgencias son las siguientes en resentirse. En el Hospital de la Paz de Madrid se llegaron a contar hasta 36 pacientes con coronavirus en una sala habilitada únicamente para 12 camas. Desde el hospital han asegurado que van a abrirse dos nuevas salas para pacientes con COVID-19. De hecho, una de ellas ya se ha puesto en marcha este martes.

Asimismo, los sanitarios denuncian que el aumento de ingresos a nivel nacional se podía haber previsto y que esta situación, además de con la pandemia, tiene que ver con descuidar la sanidad pública. "Ha sucedido de nuevo, ha venido otra ola. Por suerte, parece ser más leve en sus efectos sobre las personas, pero a nosotros nos ha dado de pleno", ha denunciado David Carbajales, portavoz del Sindicato de Enfermería (SATSE) en Cataluña.

Las unidades de cuidados intensivos ya notan la presión en algunas comunidades; la que más, Cataluña, que cuenta con una ocupación de más del 40% con pacientes solo COVID. A pesar de que la gran mayoría de los casos que se están produciendo son leves, son demasiados contagios para el sistema. "Aunque el porcentaje de pacientes que precisen un ingreso hospitalario sea pequeño, multiplicado por este número grande va a dar un resultado igualmente grande", ha explicado Pere Domingo, coordinador del departamento COVID en el Hospital Sant Pau.

En País Vasco, la ocupación supera el 30%, y Castilla y Léon ha entrado en riesgo muy alto. La situación que viven actualmente los sanitarios es de absoluto cansancio. "No se nos cuidó y el personal está ahora mismo muy cansado, decepcionado y muy harto", ha lamentado Virginia Álvarez, portavoz del SATSE en Gijón. Ahora mismo, en España ya hay más pacientes ingresados por coronavirus que en la quinta ola.

Además, estamos a punto de superar el número de pacientes en situación crítica que tuvimos en verano con la premisa de que los hospitales van a seguir tensionándose porque los contagios no frenan, especialmente después de la gran cantidad de reuniones y otro tipo de encuentros que se han producido durante estas fiestas navideñas. Quedan semanas complicadas y hay hospitales que no saben como podrán asumirlo.