NINGUNA DE LAS JÓVENES TENÍA VÍAS PUESTAS
Antonio San Juan, supervisor del SAMUR en el Madrid Arena: "Viñals no estaba haciendo reanimación ni dando órdenes"
Tres chicas en parada cardiorrespiratoria y sólo una de ellas recibiendo unos masajes inútiles. Ésa es la escena que se encontró el SAMUR al llegar a la enfermería del Madrid Arena. Así lo han declarado los sanitarios en el juicio. También que había un desfibrilador sin usar y que el doctor Viñals, el médico responsable, estaba sin hacer nada.
Hay frases que nunca se olvidan: "Me dijo que llevaba toda la noche atendiendo a borrachos y ahora fíjate lo que me han traido", señala Antonio San Juan, supervisor del SAMUR.
Es lo primero que escuchó del doctor Viñals, el supervisor del SAMUR al llegar a la enfermería del Madrid Arena. Cuando llegó había tres chicas en parada y Viñals de brazos cruzados. "No estaba haciendo reanimación ni dando ninguna orden", explica.
San Juan iba en la primera ambulancia que llegó al Madrid arena, ninguna de las jóvenes tenía vías puestas, tampoco restos de gel de reanimación y ni rastro de desfibrilador, algo que también han corroborado ante el juez otros asistentes del SAMUR. "No se usó, no se desfibriló a nadie ni se monitorizó", explica el jefe de Tráfico de Asistencia Sanitaria.
Aquella noche además, han explicado que el SAMUR no tenía ninguna constancia de la macrofiesta ni programada ninguna asistencia.