"En mi cupo tengo más de 2.000 pacientes"

La brutal sobrecarga de las enfermeras en España: faltan 100.000 para igualarnos a Europa y muchas quieren dejarlo

Datos demoledores La media europea es de 8,5 enfermeras por cada millar de habitantes, pero en España esta cifra es de 6,3. Una situación que aún puede empeorar: cuatro de cada 10 se plantea dejar la profesión.

Nuria y Mar son enfermeras. Cada día trabajan, se repite una conversación que se repite: "No hay enfermeras suficientes para cubrirnos, entonces a la hora de pedir días no hay quien nos cubra", resume Nuria Sánchez. Para estas profesionales sanitarias, pedir un día libre es imposible porque faltan enfermeras.

En concreto 100.000, si queremos igualarnos a la media europea, donde hay 8,5 enfermeras por cada 1.000 habitantes. En España, sin embargo, apenas hay 6,3 por cada millar de habitantes. En el caso del centro donde trabaja Yolanda Izquierdo, esa ratio es incluso más escandalosa. "Yo personalmente en mi cupo tengo más de 2.000", denuncia.

Pero lo que realmente alarma no es que falte gente que estudie Enfermería, sino que no llegan a ejercer o no lo hacen en nuestro país. "Todos tenemos la misma intención: ir fuera en busca de mejores condiciones laborales", reconoce en este sentido Juan Lozano, alumno de Enfermería. A esto se le suma que cuatro de cada 10 enfermeras se plantea abandonar el trabajo.

"Las enfermeras en general están frustradas porque no reciben el pago que deberían", expone Rosa Elena García, secretaria de SATSE Andalucía. "Trabajamos a turnos: mañana, tarde y noche. Y da igual que sea festivo, no festivo, domingo, fin de semana o lo que sea", incide por su parte Mar Enríquez, enfermera de Urgencias. A esos turnos imposibles se les une el hecho de que el 80% de sus contratos son temporales y uno de cada tres son contratos de jornada parcial.

Sin embargo, no son los únicos motivos por los las profesionales se plantean abandonar la profesión: "Vemos muchísimas más personas de las que deberíamos ver en un día para darles una atención de calidad", señala una joven enfermera. A la sobrecarga se suma incluso el miedo a las agresiones. "Tenemos que aguantar muchas veces agresiones verbales", denuncia en este sentido Mar. Un escenario en el que las profesionales advierten: si estos problemas no se solucionan, la falta de enfermeras irá a más.