Los enfermeros del Carlos III se sienten rechazados por atender a pacientes con ébola

El presidente del Consejo General de Enfermería, Máximo González Jurado, ha denunciado que enfermeros del Hospital Carlos III que han atendido a pacientes con ébola están siendo "repudiados" por sus compañeros y familiares, incluso por sus propios padres. Así lo ha manifestado González Jurado en rueda de prensa para informar de las conclusiones de la Cumbre Mundial "Enfermería ante el ébola", que se ha clausurado hoy en Madrid, y en la que los enfermeros han expuesto sus experiencias, muchas de ellas "desgarradoras".

Según González Jurado, algunos de los enfermeros han contado que "ni sus propios padres quieren que vayan a sus domicilios" y también han narrado que sus compañeros se alejaban de ellos en los vestuarios. Ese repudio, ha dicho, no se produce en casos aislados, sino que es generalizado, según se desprende de los testimonios de doce enfermeros que han atendido a pacientes con ébola en el Carlos III. "Todos ellos han sufrido el rechazo" tanto en el entorno laboral como familiar.

"Es terrible la estigmatización", ha denunciado el presidente de los enfermeros, que lo ha achacado al desconocimiento y a la falta de información suficiente y ha considerado que va a pasar "un tiempo para que esto cambie". También David Benton, director general del Consejo Internacional de Enfermeras, ha incidido en que para evitar el estigma lo más importante es contar con información basada en hechos. "A mayor desconocimiento, mayor estigma", ha asegurado.

Por ello, a juicio de González Jurado, "hay que tomar conciencia importante no solo frente a los pacientes que han sobrevivido, que van a vivir un auténtico calvario, sino también frente a los profesionales que han atendido a pacientes con ébola". Afortunadamente, en España la "estigmatización" no llega a los extremos de países como el Congo, donde un colega contagiado ha contado como él y su mujer fueron apedreados al regresar a su domicilio una vez curados de la enfermedad, ha precisado.

En la reunión, en la que han participado enfermeros de todo el mundo, se ha puesto de relieve que países pobres "con una situación catastrófica, sin medios y sin recursos pero con buena estructura organizativa y con equipos multidisciplinares" han dado una respuesta "fantástica". Y la "clave" está en la "humildad" y en la "transparencia", ha dicho el presidente del Consejo, quien ha citado el caso de Senegal, que reconoció no estar preparado y pidió ayuda. "Hoy han erradicado el virus y son un auténtico ejemplo".

Además de la transparencia, una de las principales conclusiones de la Cumbre ha sido "la tolerancia cero" frente al virus, ha asegurado González Jurado, quien ha señalado que las experiencias aportadas han demostrado que "haciendo las cosas bien es casi imposible que un profesional se pueda contagiar". Por ello, "no podemos serguir diciendo que todo se ha hecho bien porque seguiremos teniendo nuevos casos".

En este sentido, el doctor Benton ha reconocido que occidente no estaba "adecuadamente" preparado para afrontar el reto del ébola y ha advertido de que "todo aquel que diga que está todo bien preoparado es un iluso". Por su parte, Paul de Raeve, secretario general de la Federación Europea de Enfermería, ha asegurado haber quedado en estado de "shock" al escuchar los testimonios de los enfermeros y ha incidido en que "no hay que culpar a nadie, sino aprovechar la experiencia para hacerlo mejor".

En la reunión se ha puesto de relieve que por muchos medios que tengan los países ricos mientras no se erradique la enfermedad en África, todos el mundo estará en riesgo. Así, González Jurado ha hecho un llamamiento a todos los países para que focalicen su atención en el continente africano. En la Cumbre se ha firmado la llamada "Declaración de Madrid", en la que los enfermeros han acordado crear "de forma inmediata" un Observatorio enfermero europeo de riesgos laborales, biológicos y de bioseguridad para evaluar la normativa correspondiente y los protocolos de atención a pacientes con ébola.

También han decidido crear un grupo de trabajo para complementar el protocolo de la Organización Mundial de la Salud (OMS) y pedir la participación activa del personal de enfermería en las decisiones respecto a la prevención y cuidado de pacientes con este virus. "Realizamos el 95 por ciento de las intervenciones con pacientes infectados y, sin embargo, los que están hablando de esta cuestión son los médicos", ha apostillado el doctor Benton.