España, de borrasca en borrasca: dejamos atrás el huracán Leslie, pero no acaba el mal tiempo

Complicado el acceso a las casas de Ripoll, en Girona. El agua ha llegado hasta las puertas de las viviendas. La razón: el río Ter, a su paso por Ripoll, ha multiplicado por cuatro su caudal y ha ganado 50 centímetros de altura. Está desbordado y avanza con mucha fuerza, dejando árboles caídos y carreteras como la C-17, en los alrededores de la localidad, con una cascada de agua que dificulta la circulacion.

Cataluña es la comunidad más afectada por los restos del huracán Leslie. Ha llovido con intensidad y se han alcanzado en muchos puntos de la comunidad hasta 150 litros por metro cuadrado, y rachas de viento de hasta 80 kilómetros por hora. Hasta 17 personas han tenido que ser atendidas por los servicios de emergencias.

Además, los bomberos han asistido a 628 avisos por incidiencias relacionadas con el temporal, como caídas de árboles y ramas, y hasta 14.000 personas han sufrido cortes de luz. Un total de siete carreteras de la red secundaria continúan cortadas y hay 12 con restricciones. Además de la lluvia, también la nieve ha llegado al Pirineo catalán. Pero no solo allí.

En Huesca también han caído los primeros copos, y sobre todo, con fuerza, la lluvia. Aunque el huracán Leslie comienza a remitir, los restos de Michael, que afectó a gran parte de Estados Unidos, también han llegado a la Penínsunla, convertido en una borrasca que va del norte al sur. Su paso está dejando fuertes precipitaciones. En Galicia preocupaba el estado del mar con olas que han alcanzado los cinco metros de altura.