TRAS LA SENTENCIA DEL TRIBUNAL SUPERIOR DE JUSTICIA DE ANDALUCÍA

Greenpeace exige el derribo de El Algarrobico pese a la decisión de la justicia andaluza

Greenpeace ha recordado a la Junta de Andalucía que es propietaria del terreno donde se sitúa el hotel de El Algarrobico, en Almería, "y que por ello puede y debe proceder a su derribo de forma inmediata". La organización insta a la Junta a que recurra la sentencia ante el Tribunal Supremo, ya que las organizaciones ecologistas no pueden hacerlo.

Greenpeace ha recordado a la Junta de Andalucía que es propietaria del terreno donde se sitúa el hotel de El Algarrobico, en Almería, "y que por ello puede y debe proceder a su derribo de forma inmediata".

La ONG ha respondido así a la sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía que determina que la licencia municipal para construir el hotel en una playa de Carboneras es legal. Esta licencia de obras ha sido concedida a la promotora Azata para construir el hotel dentro del Parque Natural de Cabo de Gata.

La organización insta a la Junta a que recurra la sentencia ante el Tribunal Supremo, ya que las organizaciones ecologistas no pueden hacerlo. Bajo el criterio de la organización, la Junta debe retractarse sobre el terreno del hotel y salvaguardar la totalidad del sector urbanístico donde se asienta El Algarrobico derribando la edificación.

Además, subraya la extrañeza que le provoca que esta sentencia haya sido emitida por la Sala Tercera del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía, cuando todos los casos relacionados con el hotel han sido tratados por la Sala Primera de este tribunal.

Se trata, afirma, de la misma Sección del TSJA donde se dio un giro, cuando el juez dictaminó que el suelo donde se asienta el hotel era urbanizable. La nueva Ley de Costas incluye una "cláusula antialgarrobico" para actuar frente a acuerdos municipales que aprueben obras contrarias a la norma.

El caso de la construcción de este hotel está envuelto en una maraña de recursos judiciales que frenan el derribo del mismo tras haber pasado una década desde el inicio de su edificación.

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