SE ABRE PARA TOMAR DECLARACIONES
La Justicia reabre el caso de las muertes de 15 migrantes en la playa del Tarajal de Ceuta
La Audiencia Provincial de Cádizha ordenado la reapertura, por segunda vez, del caso de las muertes del Tarajal, que tuvieron lugar el 6 de febrero de 2014, cuando en un intento de entrada a Ceutase produjeron varias muertes con pelotas de goma y botes de humo.
La Sección VI de la Audiencia Provincial de Cádiz con sede en Ceuta ha ordenado por segunda vez la continuación de la causa relacionada con la muerte de 15 migrantes el seis de febrero de 2014 en la playa del Tarajal (Ceuta) para, al menos, intentar practicar la testifical de dos supervivientes localizados en Alemania.
Así pues, ha estimado los recursos de apelación interpuestos por cuatro organizaciones sociales contra el auto dictado el pasado 26 de enero por la titular del Juzgado de Instrucción número 6 que ordenó el sobreseimiento libre de las actuaciones relacionadas con esta causa.
Se abrió hace casi cuatro años, cuando un número "indeterminado" de migrantes de origen subsahariano pretendió acceder a territorio español bordeando el espigón marítimo fronterizo, un intento que se saldó con al menos 15 personas muertas.
En el auto, la Audiencia reprocha a la jueza instructora que descartase intentar tomar declaración a dos migrantes "sin haber realizado el más mínimo intento de oír a los testigos propuestos y admitidos, sólo con el razonamiento de que dichas personas no se encuentran residiendo legalmente en Alemania.
La Audiencia estima que "tal argumentación no puede admitirse respecto de una prueba propuesta y aceptada en tiempo hábil, menos aun cuando se acordó que la misma se practicaría mediante el auxilio judicial internacional y por videoconferencia, modificándose el criterio sin explicación plausible alguna, lo que atenta claramente contra el principio de invariabilidad de las resoluciones judiciales".
La Audiencia revocó por primera vez en enero de 2017 el sobreseimiento provisional y libre de las diligencias incoadas por la presunta comisión de supuestos delitos de homicidio, lesiones y prevaricación al entender que la instrucción no se había agotado porque se había "confundido la pertinencia y utilidad de algunas diligencias con el convencimiento, fundado o no, de que serían imposibles de realizar".