El 'Gretatómetro' pone a prueba el ecologismo de los españoles: "No me hago vegetariano ni del palo"

El Intermedio ha salido a la calle con el 'Gretatómetro', una herramienta que mide el compromiso de los españoles con el medioambiente y a la vez la indignación que puedes generar en Greta Thunberg.

La mayoría de los que atienden a los micrófonos del programa aseguran hacer gestos para cuidar el medioambiente. "Voy reciclando, lo considero muy necesario", dice una señora, mientras que un joven reivindica que "es nuestro mundo y si nosotros no lo cuidamos no lo va a hacer nadie".

Cuando la reportera les pide que se pongan una nota en función de lo concienciados que estén, ninguno se da menos de un ocho. Sin embargo, cuando empiezan las preguntas del 'Gretatómetro' comienzan a verse las debilidades.

¿Qué hacen cuando están en la calle y tienen sed? La mayoría confiesa que compra una botella de plástico de agua y que no suelen llevar una botella en el bolso, aunque algunos sí que la llevan.

Y a la hora de reciclar, hay quien reconoce que en su casa sólo tienen un cubo para la basura, o que en su pueblo es "imposible" porque sólo tienen el cubo de restos para todos los vecinos.

Con otras cosas del día a día como lavar los platos o lavarse los dientes muchos se muestran concienciados y dicen que cierran el grifo para ahorrar agua, pero a la hora de la ducha... son más los que reconocen que no están dispuestos a cerrarlo.

Tampoco son muchos los que renuncian a comer carne o se comprometen a reducir su consumo. "No, vegetariano no, ni de palo", dice un chico, y otra mujer explica que ya tiene a su hija que es vegetariana: "Me basta con ella".

Al acabar el juego, los que han sido más optimistas al principio se bajan la nota.

Otros momentos destacados

No es la primera vez que El Intermedio toma el pulso a los españoles a pie de calle. En otra ocasión, Santi Villas empleó el 'Machistómetro' para demostrar por qué es necesaria la huelga del 8M. "Ni feminista ni machista, yo soy hombre", decía un entrevistado.