OBSOLESCENCIA PROGRAMADA

El método definitivo para saber si merece la pena reparar un electrodoméstico o comprar uno nuevo

Para decidir si es más rentable arreglar un electrodoméstico averiado o sustituirlo por otro existe el llamado "método de la amortización". La economista Sara Muñoz explica cómo funciona en Equipo de Investigación.

Cuando un electrodoméstico se estropea, ¿cómo saber si merece la pena arreglarlo o, por el contrario, hacernos con uno nuevo? Para tomar una decisión, explica la economista Sara Muñoz, existe el denominado "método de la amortización de electrodomésticos".

Imaginemos, por ejemplo, que compramos una lavadora con una vida útil de 10 años por 400 euros. "Los electrodomésticos se van desgastando, se van depreciando", explica Muñoz, que precisa que esta pérdida de valor es, aproximadamente, de un 10% anual. En el ejemplo de nuestra lavadora, 40 euros al año.

Así, al final del primer año, nuestra lavadora vale 360 euros, al final del año dos, 320, y así sucesivamente hasta que en el décimo año, no vale nada. Pero, ¿y si nuestra lavadora se rompe en el séptimo año? Partamos de que el presupuesto de reparación es de 60 euros.

Si aplicamos la fórmula de la amortización de los electrodomésticos, para entonces nuestra lavadora vale 120 euros porque se ha ido depreciando. Le sumamos el coste de reparación de 60 euros y nos da un resultado de 180, que dividido entre los cuatro años de vida útil que aún le quedan, da un coste de reparación de 45 euros al año.

Por el contrario, si decidimos comprar otra, un modelo equivalente en el mercado "ya no nos costará 400 euros, porque los precios van subiendo", indica la economista. Así, una nueva nos costará 500 euros. Si dividimos su precio entre sus 10 años de vida útil, obtenemos un resultado de 50 euros al año. Esta cantidad sería el coste de depreciación de nuestra nueva lavadora.

Como el coste de reparación sería de 45 euros, frente al coste de depreciación de 50 euros, en este caso nos interesa reparar nuestro viejo electrodoméstico.

Pero, ¿compensa de verdad repararla por una diferencia de apenas cinco euros al año? "No tenemos que pensar 'son cinco euros al año'", explica Sara Muñoz, que explica que, si optamos por una nueva, "tendremos que incurrir en un gasto de 500 euros de compra del nuevo electrodoméstico, frente a los 60 de reparación". Ahora bien, concluye, "si en lugar de 60 euros nos dicen 200 euros" por reparar la lavadora rota, "en ese caso a lo mejor no te sale a cuenta".

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