El sacrificio de caballos, el gran negocio de la crisis

Paramos en una finca donde los recogen: “Antes de la crisis recogíamos animales de forma aislada. Ahora es totalmente desesperante, recibimos denuncias de 120 animales, de los que 90 se están muriendo de hambre”.

Les llegan caballos abandonados cada día y dan la voz de alerta: la matanza de caballos está siendo el gran negocio de la crisis: “No tienes nada más que meterte en Internet”.

Lo comprobamos en el portal de anuncios líder, el más visitado de nuestro país. El interés por los caballos despuntaba en 2010 y en 2012 llegó a 300.000 búsquedas al mes: “La palabra caballo es de las más buscadas en el portal”.

¿Quién está detrás de estos anuncios? El tratante, intermediario entre el dueño del caballo y el matadero. El mayor tratante de caballos de España, el que más equinos ha llevado al sacrificio, tiene su negocio junto a la Costa del Sol.

Salvador Gallego es un empresario con beneficios. Gana 40 euros por cada uno de los 40 caballos que mueve a la semana: un total de 6.400 euros al mes. Cree que “todo cambió al empezar la crisis. Antes se mataban caballos, pero sólo los más viejos, los que ya no servían. Con la crisis, todo el mundo se volvió loco”.

Un veterinario nos cuenta que “el auge económico hizo que en España se considerara el símbolo de triunfo comprar un Mercedes, vivir en un chalet y tener una finca con media docena de yeguas”.

Ahora sólo se mantienen vivas mientras se pueda pagar su mantenimiento. ¿El resultado? Una matanza sin precedentes: 31.000 caballos sacrificados en 2010, 48.000 en 2011, 70.000 el año pasado, cuando salieron de los mataderos españoles más de 15.000 toneladas de carne de caballo. ¿Dónde están?