Más de 400.000 españoles lo han hecho
Una experta en derecho digital, sobre la prohibición de escanear el iris: "El problema no es dar el dato, si no cómo lo utilizan las empresas"
Sara Antúnez ha lamentado en Más Vale Tarde que "estamos demasiado malacostumbrados a ceder nuestros datos sin leer las políticas". Además, explica que el problema no reside en que "las personas hayan dado ese dato si no en el cómo se utiliza".
En España se han escaneado el iris alrededor de 400.000 personas a cambio de ganar dinero en criptomonedas. Son varios los años que llevan funcionando, pero ante el aluvión de personas que se acercan a centros comerciales a dar sus datos personales, la Agencia Española de Protección de Datos (AEPD) ha obligado a la empresa Worldcoin a interrumpir, de forma cautelar, su actividad en España y le ha prohibido seguir escaneando el iris de miles de personas y recopilando datos personales de esa manera.
Sara Antúnez, experta en derecho digital, explica en Más Vale Tarde que el problema "no es que las personas hayan dado ese dato si no cómo lo utilizan la empresas". "La decisión que se ha tomado por parte de la agencia de protección de datos es bloquear de forma temporal que se siga recopilando este dato. Lo pueden ampliar a seis meses y cuando acabe la investigación sí que podría bloquearse de manera permanente", ha comentado.
Lo que ha movido esta decisión, según cuenta la experta, es que "no se tiene muy claro si se está informando bien al consumidor del consentimiento, de cómo van a poder eliminar esos datos y, sobre todo, qué se va a hacer con esos datos".
Antúnez ha lamentado que "estamos demasiado malacostumbrados a ceder nuestros datos sin leer las políticas". "Cuando accedemos a cualquier aplicación como Instagram estamos regalándole nuestras fotos y también son datos personales", apunta. "El iris es un dato biométrico de especial protección como puede ser la huella dactilar. A través del iris se puede obtener mucha información, incluso de salud", cuenta.
La experta en derecho digital también reconoce que "los que tenemos iPhone tenemos Face ID ya hemos dado los datos biométricos de nuestra cara y no nos hemos asustado".