Hablan abiertamente
Los primeros contactos con la heroína de dos exadictos: "Soy muy tímido y me drogo para ser más abierto"
Marian Etxabe y Félix Ponce, dos supervivientes de la heroína, cuentan a Gonzo cómo fueron sus infancias y sus primeros consumos. "Mis padres eran muy buena gente, yo era muy difícil para ellos, una bomba atómica", reconoce Etxabe.
La heroína golpeó a toda una generación sin importar la procedencia o el estatus que se tuviese. Gonzo habla con dos exadictos en el programa que trata este drama, Marian Etxabe y Félix Ponce, quienes explican de dónde venían antes de tener sus primeros consumos.
En el caso de Ponce, sus padres eran de Granada y viajaban con mucha frecuencia. Fue en Palma donde tuvo su primer contacto con las drogas, algo que vio como una manera de "abrirse". "Me resultó muy difícil ser joven. Soy reservado y poco hablador", admite.
Más Noticias
-
Aurelio Manzano, a los 'amigos' de Mayra Gómez Kemp: "No los he visto aquí" -
La Rosilla, el poblado de chabolas que fue el epicentro de la heroína: "Iban 20.000 personas cada día a comprar" -
Las predicciones del horóscopo para esta semana del 21 al 27 de octubre según Jabifus -
Una vaca se cuela en una tienda de pintura y dos hombres le tienen que ayudar a salir porque no sabe -
Una mujer se queda encerrada en el interior de un bajo por culpa de ir mirando el móvil mientras camina
Por su parte, Etxabe cuenta que vivió en Ondárroa, donde "se movía mucho dinero y mucho de todo". "Nunca tuve ninguna necesidad, fui la princesa de la casa. Mis padres eran muy buena gente, yo era muy difícil para ellos. Era adoptada pero me adoptaron dos padres maravillosos", confiesa.
Una dura realidad
Una exadicta a las drogas cuenta cómo se enteró que tenía VIH: "En meses la gente moría, no sabía si iba a ser la próxima"
Marian Etxabe confiesa a Gonzo que llegó a estar "preparada para morir", ya que "todos los días" perdía a alguien conocido. "Llorábamos por cada muerte, nos hicimos un escudo para seguir viviendo", lamenta.