EL JUEZ CONSIDERA QUE PERTENECÍAN A UNA ORGANIZACIÓN CRIMINAL
El cocktail de la operación Púnica: construcción, energía, informática y política
El cocktail de adjudicaciones de la operación Púnica tiene a varias personas clave. El primero es Marjaliza, el conseguidor de Valdemoro. Él articula la trama desde la perspectiva del ladrillo. La empresa Cofely es el segundo ingrediente. Ofrecían a los consistorios cuantiosos ahorros, según la Guardia Civil, con un sistema organizado de sobornos. La tercer pieza es el joven Alejando de Pedro, encargado de borrar la huella digital de algunos implicados. El cuarto ingrediente se Marcos Martínez, sustituto de Isabel Carrasco en la Diputación de León. Su mandato no pasará a la historia por virtuoso, quizás sí lo hará por breve.
En el ladrillo, la clave es David Marjaliza, el conseguidor de Valdemoro. En ese pueblo de Madrid fue Marjariza concejal hasta que al Ayuntamiento llegó su amigo de toda la vida: Francisco Granados.
En ese momento, Marjaliza deja la política y se convierte en el constructor estrella. Según la investigación, Marjaliza conseguía de forma irregular casi todos los concursos de los municipios vinculados a esta trama Púnica.
La empresa Cofely es el segundo ingrediente clave de la operación. Es la filial de una empresa pública francesa. La labor de Cofely parecía loable. Ofrecían a los ayuntamientos un ahorro de hasta el 40% en su factura energética. En al menos tres municipios de la Comunidad de Madrid aceptaron. Según la Guardia Civil, las razones no habrían sido medioambientales sino un sistema organizado de sobornos.
Cuatro altos cargos de Cofely han sido detenidos, empezando por su director general. Una sociedad de origen francés que vino a España a sacar provecho de la corrupción. Alejandro de Pedro, es de los principales implicados en la operación Púnica. Se ofrecía a alcaldes del PP como gestor de redes sociales, creador de páginas web y mago de las campañas digitales.
Durante las últimas elecciones autonómicas, De Pedro triplicó sus ingresos; sobre todo en la Comunidad Valenciana. Allí empezó a relacionarse con políticos del PP valenciano. Entre ellos, con Juan Cotino.
Pedro habría creado para Cotino y sus compañeros páginas webs y perfiles falsos en redes sociales pensados para ensalzar a los populares y desprestigiar a la oposición. A base de megas, la amistad surgió y De Pedro y Cotino acabaron compartiendo largas sobremesas tras enormes paellas. De Pedro presumía también de haber llevado también la estrategia digital de Ana Botella e Isabel Carrasco, asesinada en primavera.
A través de Carrasco llegamos hasta otro de los detenidos clave. El presidente de la Diputación de León, Marcos Martínez Barazón, 'el breve'. Sólo hace cinco meses que sustituyó a la antigua presidenta. Juró el cargo y prometió usar el dinero de la Comunidad de forma justificada.
Se veía como futuro presidente del PP de León, pero no. Esta semana, la Guardia Civil le ha tomado las huellas. El juez ha decretado para él prisión incondicional. En Murcia fueron detenidos tres altos cargos de la Consejería de Turismo del Gobierno regional, del PP, y el exalcalde de Cartagena, José Antonio Alonso, del PSOE.