Mónica García denuncia que Monasterio "traspasó una línea roja" y cree que "Ayuso es rehén de las propuestas de Vox"

La campaña electoral del 4M saltaba por los aires este viernes en el debate de la 'Cadena SER', cuando la candidata de Vox puso en duda las amenazas de muerte recibidas por Pablo Iglesias, que optó por marcharse. ¿Cómo lo vivió Mónica García?

La candidata de Más Madrid ha señalado en laSexta Noche que "fue bastante violento, tenso y desagradable". "El manual de la ultraderecha lo conocíamos, pero ayer se traspasó una línea roja. La traspasó la señora Monasterio cuando fue incapaz de condenar unas amenazas de muerte a Marlaska, a María Gámez y al candidato que tenía a su derecha", ha aseverado.

"Hemos visto la cara más cruda de lo que es la ultraderecha", ha agregado la candidata, cuyo partido ha optado por no participar en más debates con Vox. "Nada más salir de ese debate fuimos los primeros que dijimos que no volvíamos a ningún debate con Vox", ha señalado García, a pesar de que el candidato de Unidas Podemos destacase este sábado que el resto de candidatos permanecieron en el debate tras su marcha.

"Siempre hemos tenido la duda, y creo que es una duda legítima, de cómo se confrontaba a la ultraderecha: si había que rebatirles o había que ignorarles. Yo hice las dos cosas ayer", ha defendido la médica al respecto.

"Las fuerzas progresistas hemos demostrado que somos capaces de entendernos y de saber cuál es el enemigo común, lo que tenemos enfrente. Y lo que tenemos enfrente es la ultraderecha más reaccionaria, el odio, la violencia, la falta de convivencia", ha asegurado no obstante García, que sostiene que PSOE, Podemos y Más Madrid así lo demostraron en el debate de Telemadrid.

Preguntada por una hipotética ilegalización de Vox, Mónica García ha señalado que el partido de extrema derecha "no es nuevo", sino que "viene sembrando la intolerancia y nutriendo nuestra sociedad de falta de convivencia desde que apareció", y ha defendido que la receta contra la extrema derecha "son los partidos verdes" y "feministas" que hablan "de lo que Vox teme hablar", como la sanidad o la educación.

En su opinión, Isabel Díaz Ayuso "aspira a gobernar con ellos" y "tiene su suerte anclada a la de Vox". "Estas elecciones se han convocado para que Ayuso entre de la mano de la señora Monasterio, y que la señora Monasterio pueda acabar en una Consejería de Educación", ha asegurado la candidata, que ha instado a la actual presidenta madrileña a responder a "si aspira a gobernar con el odio, la intolerancia y la violencia".

"Estas elecciones las ha convocado Ayuso para cambiar de socio de gobierno y preferentemente Vox, y me da que la señora Ayuso es rehén de las propuestas de Vox", ha sentenciado.