CASOS LEVES Y GRAVES

Nocturia: levantarse por las noches para ir al baño puede llegar a ser un problema de salud

Se trata de un tipo de alteración que puede afectar la calidad del sueño y descanso.

Hay personas a las que les cuesta mucho conciliar el sueño cuando llega la noche o que, una vez dormidos, algo interrumpa nuestro sueño. Lo cierto es que todos estamos de acuerdo que no hay nada más incómodo que algo te despierte y te saque de tus sueños, y si a eso le sumas el hecho de tener que levantarse de la cama, es mucho peor.

Hablamos de la nocturia, es decir, la necesidad de levantarse en mitad de la noche para ir al baño. En algunos casos puede deberse simplemente al haber tomado demasiados líquidos antes de acostarse, pero existen otros casos en los que la situación se vuelve recurrente y puede causar problemas de salud. Te contamos los detalles.

Los síntomas más frecuentes suelen estar relacionados con la necesidad de ir al baño, lo que provoca que nos despertemos. Suele ser porque se produce una gran cantidad de orina al día o porque se incrementa durante la noche. El cuerpo no es capaz de retener esa cantidad, lo que hace que nos despertemos. Sin embargo, también existen casos en los que se produce todo lo contrario, es decir, personas que duermen mal por la noche y, aunque no tengan ganas de ir al baño ni esa sea la causa que les ha despertado, van igualmente.

Este problema, que afecta al sueño y a la calidad de vida, es más frecuente según envejecemos. Se estima que tres de cada cinco personas mayores de 70 años la sufren, aunque también se puede dar en edades más tempranas. Y afecta por igual a hombres y mujeres.

Causas y recomendaciones

Las causas de la nocturia dependerán del tipo de afección que se tenga ya que existen casos leves y graves.

Los casos leves pueden estar causados por un aumento en la ingesta de líquidos a lo largo del día o poco antes de irse a dormir y no tendría mayor trascendencia. Por el contrario, una nocturia grave suele estar relacionada con dolencias de la vejiga o la próstata, como es la infección de orina. Otras de las causas que pueden producirla pueden ser diabetes, una insuficiencia renal o un cáncer de próstata, por lo que se recomienda acudir a un especialista.